MADRID, 21 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las Fuerzas Armadas de Nigeria han asegurado que investigan un bombardeo supuestamente llevado a cabo por uno de sus aviones contra una aldea nigerina situada cerca de la frontera común que se saldó con la muerte de más de una decena de civiles.
"Como asunto de política, la Fuerza Aérea no lleva a cabo incursiones en áreas fuerza de las fronteras territoriales de Nigeria. Esa es nuestra política", ha dicho Jimmy Akpor, uno de los portavoces del Ejército nigeriano.
Así, ha recalcado que las autoridades han abierto una investigación para intentar esclarecer lo sucedido, según ha recogido el portal de noticias PM News Nigeria, considerado cercano al aparato de seguridad del país africano.
La organización no gubernamental Médicos Sin Fronteras (MSF) denunció el domingo la muerte de doce personas, entre ellas cuatro niños, en un bombardeo en el sur de Níger. Los supervivientes del ataque, que dejó 16 heridos, han responsabilizado a un avión de combate nigeriano.
Según los testimonios, el avión sobrevoló primero la aldea de Nachambé, cerca de la aldea de Garin Kaoura en el distrito de Madarounfa, situada a pocos kilómetros de la frontera con Nigeria y habitada por personas pertenecientes a la etnia peul. Luego, según los testigos, voló nuevamente sobre la aldea arrojando municiones.
Por su parte, el gobernador de la región nigerina de Maradi, Chaibou Aboubacar, ha elevado a siete el número de niños muertos en el ataque y ha acusado igualmente a Nigeria. "El Ejército nigeriano llevó a cabo bombardeos aéreos y supongo que bandidos armados fueron alcanzados", ha señalado.
"Estos bombardeos alcanzaron a una familia en lado nigerino, a pocos kilómetros de la frontera. Desgraciadamente, en el momento de los hechos sólo había niños jugando en un patio", ha relatado en declaraciones concedidas a la emisora Radio France Internationale.
El Ejército nigeriano ha incrementado sus operaciones en el norte del país contra miembros de grupos criminales armados responsables de un repunte de los ataques y los secuestros durante los últimos meses en esta zona del país africano.
Los ataques en Nigeria, anteriormente centrados en la zona noreste del país --donde operan Boko Haram y su escisión, Estado Islámico en África Occidental (ISWA)-- se han extendido a otras zonas del norte y el noroeste, haciendo saltar las alarmas por la posible expansión de estas redes terroristas y criminales, muchas de las cuales viven del secuestro de civiles.