Los niños de África podrían conformar en 2030 un 40% de la población más pobre del mundo

Niños en República Democrática del Congo
REUTERS
Actualizado: lunes, 29 agosto 2016 11:04

144 millones de niños, casi una tercera parte de ellos entre cero y cuatro años El grupo de estudios ODI realiza un llamamiento urgente para la inversión en políticas educativas

MADRID, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -

Dentro de 15 años, más del 40 por ciento de la población más pobre del mundo estará formada por los niños del África subsahariana menores de 18 años, el doble del porcentaje actual. Se trata de 144 millones de niños, 46 millones de ellos entre 0 y 4 años, que vivirán bajo el umbral de la extrema pobreza, con un euro al día, según se desprende del estudio realizado esta semana por el grupo de estudios británico Overseas Development Institute (ODI).

Teniendo en cuenta esta perspectiva, la organización ha realizado un llamamiento urgente a la comunidad internacional para que deje de limitarse a "ambiciosas declaraciones en cumbres internacionales" y conceda de una vez a esta crisis la importancia que merece, potenciando tres factores esenciales: educación, sanidad y transferencias de ayuda en efectivo, claves para reducir la pobreza, la desigualdad y cambiar los patrones demográficos.

"La educación, en particular, es absolutamente central", ha declarado a Reuters el director ejecutivo de ODI y coautor del informe, Kevin Watkins. El África subsahariana es la región del mundo donde es más difícil escapar de la extrema pobreza, según datos del Banco Mundial. La desigualdad es tan prominente y el crecimiento tan dependiente de los recursos que el rápido crecimiento económico mencionado apenas se traduce en reducción de la pobreza.

Y ello se debe a que África está siendo escenario de un fuerte crecimiento poblacional por dos motivos: la reducción de los fallecimientos infantiles y el elevadísimo índice de natalidad --4,7 niños por mujer, mayor que Asia--, alimentado por las prácticas de matrimonio juvenil. En suma: los niños tendrán más posibilidades de sobrevivir, pero a corto plazo significa un mayor número de menores hambrientos.

De ahí que la educación sea instrumental. "A través de la educación se obtienen habilidades, las chicas se casan más tarde y las mujeres ganan la confianza necesaria para exigir cuidados médicos y tratamientos anticonceptivos", añade Watkins.

Nigeria es el frente de esta batalla. El país más poblado de África --188 millones de habitantes-- es también el país con mayor número de niños que han abandonado la escuela y con la mayor diferencia de género en lo que a escolarización se refiere. "O mejora la situación allí, o la región entera va a descarrilar", añade.

A favor, Watkins destaca que el África subsahariana ha experimentado un rápido crecimiento económico --"se encuentra en la vía rápida, y ahora hay más democracia en el continente de la que nunca ha existido", apunta-- pero corresponde a los líderes africanos tomar inmediatamente iniciativas para poner fin a prácticas dañinas como el matrimonio infantil.

"Es hora de que estos líderes den un paso adelante para combatir estas desigualdades de género que impiden a las mujeres disponer de capacidad de elección y alcanzar su potencial", destaca Watkins, quien remite directamente a las propuestas del informe en este sentido. El documento ofrece un abanico de posibilidades comenzando por la expansión de la cobertura médica para las jóvenes.

"La distribución de material y conocimientos sobre tratamientos anticonceptivos podría conseguir que eligieran formar familias de menor tamaño", apunta el documento, que además propone el incremento de incentivos económicos en efectivo "hacia programas bien enfocados", que "generen múltiples beneficios en los ámbitos de la nutrición, la educación y la resistencia a enfermedades".

Los beneficios serán inmediatos. En 2030 la población juvenil en edad laboral según la media africana --de 15 a 24 año -- se incrementará en 94 millones. "Si conseguimos enfocar la energía de esta fuerza de trabajo emergente con la ayuda de una educación decente, habremos conseguido obtener un catalizador para el crecimiento", explica el informe.

Por contra, advierte, "el fracaso de estas iniciativas convertirá una oportunidad demográfica en una bomba de relojería social".