WASHINGTON, 6 May. (EUROPA PRESS) -
La vicesecretaria de Defensa para Política del Pentágono, Michele A. Flourney, ha subrayado que no existe "ninguna evidencia definitiva" de que los Servicios de Inteligencia de Pakistán (ISI) conocieran el paradero del líder de Al Qaeda, Osama Bin Laden.
La mujer ha revelado que el lunes miembros de la Inteligencia paquistaní se entrevistaron con funcionarios del Pentágono, con quienes tuvieron una "conversación sincera", horas antes de que se celebrara una reunión regular del órgano estadounidense.
"Todavía estamos hablando con los paquistaníes y tratando de averiguar qué sabían y qué no sabían", ha dicho Flourney, desde el Instituto Aspen, en declaraciones recogidas por el diario 'The New York Times'.
No obstante, ha apuntado que "de momento" no cuentan con "ninguna evidencia definitiva" de que los servicios paquistaníes supieran que Bin Laden se alojaba en un edificio de tres plantas de Abbottabad, apenas a unos kilómetros de la capital, a pesar de que estaba al lado de la principal academia militar del país.
Los congresistas estadounidenses dudan de la fiabilidad del ISI, ya que consideran increíble que no advirtiera la presencia del terrorista en su territorio. Por ello, la vicesecretaria ha urgido a sus colegas paquistaníes a demostrar al Congreso su compromiso en la lucha contra el terrorismo, ayudando, por ejemplo, a descifrar el contenido de los documentos encontrados en dicho inmueble.
AL QAEDA Y AFGANISTÁN
Interrogada acerca de las consecuencias que la muerte de Bin Laden podría tener sobre la misión en Afganistán, orientada a sofocar a la insurgencia talibán --vinculada en numerosas ocasiones a Al Qaeda--, Flourney se ha mostrado cauta.
La política ha considerado que es demasiado pronto para hacer una valoración de esta naturaleza, aunque ha expresado su confianza en que este golpe a la organización terrorista sirva para que los talibán "se replanteen su futuro".
"Creo que ahora, con Usama bin Laden muerto, algunas de las relaciones personales que le vinculaban con líderes talibán están rotas", ha planteado, señalando que "esto les da la oportunidad de dar un paso atrás y renunciar a su afiliación" con Al Qaeda.