Ambulancias con heridos por la explosión de miles de 'buscas' en Líbano llegan al Hospital de la Universidad Americana en la capital, Beirut - Marwan Naamani/dpa
La pesquisa busca esclarecer la posible implicación de una empresa propiedad de un noruego en la venta de los dispositivos
MADRID, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de Noruega han confirmado este miércoles la apertura de una "investigación preliminar" en torno a las informaciones que apuntan a la posibilidad de que una empresa propiedad de un noruego esté relacionada con la venta al partido-milicia chií Hezbolá de los miles de 'buscas' que estallaron la semana pasada en Líbano, dejando más de diez muertos y más de 2.000 heridos.
"El Servicio de Seguridad de la Policía (PST) ha abierto una investigación preliminar para determinar si hay motivos para abrir una investigación a partir de las informaciones en los medios sobre que una empresa de propiedad noruega podría haber estado implicado en la entrega de 'buscas' a Hezbolá", ha dicho Haris Hrenovica, fiscal del organismo, en declaraciones facilitadas a Europa Press.
La decisión del organismo llega después de que Bulgaria especificara la semana pasada que estaba investigando a la empresa Norta Global, con sede en la capital, Sofía, y fundada en 2022 por el ciudadano noruego Rinson Jose.
Así, la Agencia de Seguridad Nacional de Bulgaria (NSSA) recalcó que las pesquisas apuntaban "sin lugar a dudas" que los 'buscas' no fueron fabricados, importados o exportados desde el país europeo, antes de agregar que Norta Global "no llevó a cabo transacciones sobre las que Bulgaria tenga jurisdicción relativas a la compra o venta de bienes".
Las primeras pistas tras las explosiones llevaron a la firma taiwanesa Gold Apollo, que rápidamente salió al paso de las sospechas señalando que había cedido los derechos de fabricación a una segunda empresa, BAC Consulting, con sede en Hungría. Taiwán llevó a cabo la semana registros en las oficinas de ambas empresas en la isla.
Sin embargo, el Gobierno de Hungría indicó que BAC Consulting es un mero "intermediario comercial", sin capacidad de fabricación por tanto de los dispositivos, y fuentes citadas por el portal búlgaro Telex han declarado que fue en realidad una empresa con sede en Sofía, Norta Global, la que facilitó la venta de los dispositivos entregados a Hezbolá.