OSLO, 5 Ago. (Reuters/EP) -
El Gobierno noruego apelará en noviembre la sentencia emitida el pasado mes de abril por un tribunal de Oslo que determinó que los Derechos Humanos de Anders Breivik, el asesino en masa que acabó con las vidas de 77 personas en julio de 2011, habían sido ultrajados por el Estado al mantenerle en "un mundo completamente confinado" durante su estancia bajo aislamiento en la cárcel.
La sentencia del tribunal consternó a familiares y amigos de las víctimas -- la mayoría jovenes que participaban en un campamento de verano del Partido Laborista de Noruega --, al considerar que la corte había cedido a las exageradas quejas de Breivik.
El asesino de Oslo y Utoya, quien en repetidas ocasiones ha comparecido ante el tribunal haciendo el saludo Nazi, llegó a decir que se quejaba de que le servían café frío y comida cocinada en microondas, un tratamiento "peor que el 'waterboarding'" en referencia a las prácticas de tortura por ahogamiento realizadas contra los presos de Guantánamo.