MADRID, 27 May. (EUROPA PRESS) -
Casi nueve de cada diez estadounidenses respaldan que haya cambios en los protocolos generales de la Policía, dos años después de la muerte de George Floyd durante una controvertida operación que se saldó con una condena de más de 20 años de cárcel sobre el agente que le aprisionó el cuello, Derek Chauvin.
Un sondeo elaborado por la firma Gallup refleja que un 50 por ciento de los encuestados son partidarios de "grandes" cambios, mientras que un 39 por ciento apuesta por que haya también modificaciones, aunque "menores. El dato de quienes reclaman reformas de mayor calado se dispara entre la población afroamericana, hasta el 72 por ciento.
La muerte de Floyd el 25 de mayo de 2020 desató una ola de protestas sin precedentes, pero esta movilización no se ha traducido en ningún cambio específico en la labor de las fuerzas de seguridad. Las demandas, sin embargo, persisten y más de dos terceras partes de la población quieren que se aparte a los agentes vinculados de forma recurrente a casos de abuso, que no haya interceptaciones indiscriminadas en la calle o que se pueda perseguir legalmente a los policías con más facilidad.
Respecto a los tratos con la Policía, sólo un 25 por ciento de las personas entrevistas ha reconocido que ha tenido algún tipo de interacción con las fuerzas de seguridad en el último año, 17 puntos menos que en otro sondeo similar publicado en 2020.
De ellas, tres de cada cuatro afirman que recibieron un trato justo y respetuoso, mientras que el 68 por ciento lo describe como una "experiencia positiva". Entre la población blanca, este último dato aumenta hasta el 81 por ciento entre la población blanca, mientras que en el caso de los hispanos es del 69 por ciento.