El nuevo presidente de Burundi cambia de estrategia y anuncia una campaña contra el coronavirus

Evariste Ndayishimiye , nuevo presidente de Burundi
Evariste Ndayishimiye , nuevo presidente de Burundi - EVRARD NGENDAKUMANA / XINHUA NEWS / CONTACTOPHOTO
Publicado: martes, 30 junio 2020 23:43


MADRID, 30 Jun. (EUROPA PRESS) -

El nuevo Gobierno de Burundi ha anunciado un paquete de medidas frente a la pandemia de coronavirus, en un cambio de estrategia respecto a la postura adoptada hasta la fecha por las autoridades, que han rechazado imponer un confinamiento, en medio de los temores sobre una cifra de contagios más elevada que la oficial.

El presidente burundés, Evariste Ndayishimiye, ha destacado durante la toma de posesión del nuevo Ejecutivo que "la pandemia de coronavirus es un gran enemigo de los burundeses porque todo el mundo vive con miedo". "Nos preparamos para combatir a este enemigo", ha manifestado, según ha informado el diario independiente 'Iwacu'.

Así, ha destacado el lanzamiento de una campaña que tendrá como lema 'Cuidarse, no contagiarse y no propagar' que incluye una reducción del 50 por ciento del precio del jabón para hacerlo más accesible y garantizar que la población tiene facilidades para mantener una higiene adecuada ante el peligro del coronavirus.

"En los centros urbanos, el Gobierno se prepara para reducir el coste del agua hasta que el coronavirus no sea una preocupación en Burundi", ha dicho, antes de advertir de que habrá sanciones para los que intenten sacar beneficios económicos a través de la exportación del jabón a precios reducidos.

Ndayishimiye ha manifestado además que las autoridades desplegarán en todas las provincias un equipo para realizar pruebas gratuitas a los casos sospechosos y ha añadido que "toda persona que se niegue a someterse a las pruebas será considerada como una que está a favor de propagar el virus y no será tratada de forma distinta a un brujo".

Las palabras del nuevo presidente burundés contrastan con la de su predecesor, Pierre Nkurunziza, a quien ha sucedido tras el fallecimiento repentino del mandatario a principios de junio a causa de un infarto, según la versión del Gobierno.

Nkurunziza había abogado por "reunirse sin mascarillas" argumentando que "Dios purifica el aire del país" y se mostró contrario a aplazar las elecciones presidenciales, parlamentarias y locales celebradas a finales de mayo, en las que se impuso Ndayishimiye.

Asimismo, el Gobierno de Burundi declaró 'persona non grata' al jefe de la delegación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y otros tres integrantes de la misma y les ordenó abandonar el país poco antes de la votación, sin dar explicaciones al respecto.

Desde entonces, las autoridades han dejado de publicar datos sobre la pandemia, si bien médicos de Burundi alertaron a mediados de mayo de la existencia de una cadena de contagios "oculta y descontrolada" en el país que las autoridades habrían intentado esconder para no obstaculizar el proceso electoral.

Leer más acerca de: