El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha convocado para las 20.15 horas de este viernes una rueda de prensa tras anunciar esta madrugada en la cadena pública NPR la toma de represalias, tanto públicas como confidenciales, contra la injerencia rusa en las elecciones que han denunciado las agencias de Inteligencia estadounidenses. Esta conferencia tendrá lugar antes del inicio de las vacaciones navideñas en Hawái, en medio de un marcado incremento de la tensión con el equipo de transición del presidente electo, Donald Trump, a quien los demócratas acusan de haber resultado beneficiado de la interferencia rusa mientras grupos bipartidistas del Senado, así como el propio Obama, han exigido una investigación en profundidad del incidente. De hecho, fuentes de la cadena CNN han indicado que el roce entre la Casa Blanca y el equipo de Trump -- que ha negado categóricamente tanto que haya resultado beneficiado por Rusia como que el Kremlin haya realizado campaña de intoxicación alguna -- ha llegado hasta tal punto que "la administración saliente ya no considera prioritario que la transición de poder sea tranquila". Esta madrugada, Obama rompió de una vez por todas el relativo silencio que su administración ha guardado sobre el desarrollo de las elecciones en una entrevista con la emisora NPR. Silencio que, según fuentes demócratas aseguraron el miércoles a la cadena NBC, fue ordenado por el propio presidente durante la campaña ante el convencimiento de que Clinton iba a ganar los comicios. En los extractos de la entrevista, que se emitirá hoy en su integridad, Obama aseguró que cree "que no existe ninguna duda de que cuando un Gobierno extranjero intenta tener cierto impacto en la integridad de unas elecciones hay que tomar medidas". "Y lo haremos, en el momento y lugar que consideremos oportuno. Algunas (de las medidas) serán explícitas y se darán a conocer públicamente; pero otras quizás no", ha continuado. ATAQUE INFORMÁTICO De hecho, hasta la compañía de seguridad Recorded Future, encargada de supervisar el funcionamiento de las máquinas electorales tras los comicios del pasado 8 de noviembre, ha informado este jueves de que el pasado 1 de diciembre sufrió un ataque informático. Según ha informado la propia firma en un comunicado, la investigación llevada a cabo por su equipo ha confirmado que un 'hacker' ruso --que en el informe denomina 'Rasputin'-- mantuvo contacto con alguien a quien quería comprar las credenciales de acceso a la Comisión de Asistencia Electoral. Esta información, sumada a las conclusiones preliminares de las agencias de Inteligencia estadounidense llevaron ayer al secretario de prensa de la Casa Blanca, Josh Earnest, a lanzar un ataque directo contra Trump. "Es un hecho, y está grabado, que el nominado republicano a la Presidencia llegó a animar a Rusia a que pirateara los correos electrónicos a su oponente (la candidata demócrata Hillary Clinton)", declaró Earnest en referencia a unas declaraciones formuladas por el magnate el pasado mes de julio en Florida, en plena campaña. "Rusia, si estás escuchando", aseveró Trump, "espero que seas capaz de encontrar los correos (de Clinton) que faltan". Trump contestó a las declaraciones de Earnest durante la gira triunfal que está haciendo por los estados donde se alzó como vencedor de las elecciones. "Ese hombre es un iluso", espetó Trump ante la multitud, aunque se abstuvo de acusar al presidente Obama de estar detrás de esta escalada en la retórica, como opinan fuentes cercanas a la Casa Blanca. "Quizás Earnest estaba recibiendo órdenes de otra persona", declaró el presidente electo. Una opinión que no comparte el antiguo asesor de Obama, David Axelrod, quien consideró "enormemente improbable" que Earnest lanzara semejante ataque sin el consentimiento del presidente. "Un secretario de prensa no realiza comentarios así sin autorización alguna", indicó a última hora de ayer. EL KREMLIN: "PUTIN YA HA CONTESTADO A OBAMA" Por su parte, el Gobierno ruso ha indicado que el presidente Obama ya sabe de boca de su homólogo, Vladimir Putin, la opinión del Kremlin a estas acusaciones y "la respuesta fue muy clara", ha hecho saber el asesor presidencial ruso, Yuri Ushakov, desde Tokio. Esta respuesta tuvo lugar en la última cumbre del G20, donde Putin y Obama mantuvieron una conversación privada "donde tocaron varios temas, éste en particular". "Y la respuesta que recibió el presidente estadounidense fue francamente clara, aunque quizás no encajara mucho con lo que Obama intentaba explicarnos", declaró Ushakov a la agencia rusa Tass.