BRISBANE (AUSTRALIA), 15 (Reuters/EP)
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha afirmado durante un discurso en el marco de la cumbre del G-20 que la "agresión" de Rusia contra Ucrania "es una amenaza para el mundo", a lo que el Kremlin ha respondido negando su participación en la reciente escalada de la actividad militar en el sureste de Ucrania.
"Estados Unidos es un país líder en la oposición a la agresión de Rusia contra Ucrania, que es una amenaza para el mundo, como vimos en el atroz derribo del avión MH17" de Malaysia Airlines, ha señalado Obama, en referencia al siniestro en el que murieron 298 personas el pasado 17 de julio en el este de Ucrania.
Según los informes de los expertos, el avión "se partió en el aire probablemente como resultado de daños estructurales provocados por un gran número de objetos a gran velocidad que penetraron en el aparato desde el exterior". El Gobierno ucraniano acusó a los separatistas prorrusos de haber derribado el avión, si bien éstos lo negaron.
Por su parte, el Gobierno ruso ha aprovechado este cumbre para insistir en que no ha tomado parte en la reciente escalada de la actividad militar en el sureste de Ucrania e insiste en que apoya la implementación del alto el fuego acordado en Minsk el pasado mes de septiembre.
Así lo ha manifestado el asesor de política exterior del Kremlin, Yuri Ushakov, quien también ha criticado las sanciones que la Unión Europea y Estados Unidos están aplicando contra Rusia. "Nosotros no estamos involucrados", ha apostillado el funcionario ruso.
En este contexto, Ushakov asegura que cuentan con el apoyo de otros líderes de los países que conforman el denominado grupo BRICS. "Todos dijeron que las sanciones son ilegales, que violan Carta de la ONU y obstaculizan la recuperación económica", ha sentenciado.