WASHINGTON, 2 Ago. (Reuters/EP) -
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha defendido este martes los ataques aéreos realizados por las fuerzas norteamericanas contra las posiciones de combate del Estado Islámico en Libia para impedir que la organización terrorista se extienda por la región.
Obama ha explicado que los bombardeos contra los milicianos de negro son para ayudar a las fuerzas del frágil Gobierno de unidad nacional de Libia a combatir a los yihadistas y recuperar la estabilidad de la nación norteafricana.
"La ausencia de estabilidad en Siria e Irak ayudó a alimentar algunos de los desafíos que hemos visto en la crisis migratoria en Europa", ha dicho Obama, en una comparecencia junto al primer ministro de Singapur, Lee Hsien Loong.
El Pentágono confirmó el lunes que Estados Unidos ha vuelto a bombardear varios objetivos del Estado Islámico en Sirte, a petición del Gobierno de unidad nacional, los primeros de una campaña para expulsar a los yihadistas de esta ciudad libia.
Sirte es el bastión del Estado Islámico en Libia, de modo que su derrota ahí es fundamental para derrotar a la organización terrorista. Tras tres meses de ofensiva, las tropas gubernamentales finalmente han logrado avanzar en la batalla por la ciudad.