MADRID 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha subrayado este martes que la situación en Siria "es inaceptable", pidiendo mayor unidad entre la comunidad internacional para hacer frente a la situación.
"No es el asunto de esta cumbre, pero todos sabemos que lo que está pasando en Siria (...) es inaceptable, y no estamos lo unidos que deberíamos para ponerle fin (a la crisis)", ha valorado durante la Cumbre sobre Refugiados en Nueva York.
En sus declaraciones, Obama ha dicho que el mundo "hace frente a una crisis de proporciones épicas", recordando que "más de 65 millones de personas se han visto desplazadas de sus viviendas".
"Estoy aquí hoy porque esta crisis es una de las pruebas más urgentes de nuestro tiempo, de nuestra capacidad para una acción colectiva", ha apuntado, señalando directamente a la situación que atraviesan Siria, Afganistán y Somalia.
En este sentido, ha recalcado que "la mentalidad que permite que haya violencia con impunidad es algo inexcusable", añadiendo que la comunidad internacional "continúa generando excusas".
"Es una prueba para nuestro sistema internacional (...) ya que la inmensa mayoría de los refugiados están siendo acogidos por sólo diez países que soportan la mayor carga (...), países que generalmente tienen ya pocos recursos", ha valorado.
Asimismo, Obama ha destacado que es también "una crisis sobre la seguridad compartida, no porque los refugiados sean una amenaza (...) sino porque cuando los refugiados desesperados pagan a traficantes despiadados, financia a los mismos criminales que trafican con armas, drogas y niños".
"Cuando las naciones con sus propias dificultades internas se encuentran acogiendo a masivas poblaciones de refugiados de forma indefinida, podrían sufrir más inestabilidad", ha advertido.
El mandatario estadounidense ha hablado además contra "rechazar a los refugiados simplemente por su cultura o su religión", argumentando que ello "refuerza la propaganda terrorista de que países como Estados Unidos se oponen de alguna manera al Islam, lo que es mentira".
"Esta crisis es una prueba a nuestra humanidad. Esas niñas con las que se trafica y a las que se tortura podrían ser nuestras hijas. Ese pequeño niño en la playa podría ser nuestro hijo o nuestro nieto. No podemos mirar a otro lado y darles la espalda", ha remachado.