Lamenta que pose con la Biblia ante una iglesia y asegura que su Diócesis se distancia del "lenguaje incendiario" del presidente
MADRID, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
La obispa de la Diócesis Episcopaliana de Washington Mariann Edgar Budde se ha declarado "indignada" tras ver las imágenes del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, posando con una biblia en una iglesia y ha dejado claro que su congregación se alinea "con los que buscan justicia por la muerte de George Floyd", han informado la CNN y el diario 'The Washington Post'.
El mensaje de la obispa episcopaliana, de la que depende la iglesia de Saint John, en la que ha posado Trump hace unas horas con una biblia y que se encuentra frente a la Casa Blanca, llega después de que el mandatario saliera escoltado de la residencia presidencial y, tras la intervención de la Policía para expulsar con gases lacrimógenos a los manifestantes allí congregados, posara ante las cámaras frente al templo exhibiendo una biblia y diciendo que "Dios es amor".
"Estoy indignada. El presidente no ha rezado cuando ha venido a la iglesia de Saint John ni ha reconocido la agonía de nuestro país ahora mismo", ha declarado a la CNN. La obispa ha lamentado que Trump no haya reconocido "en particular" la "agonía" de "las personas de color" de Estados Unidos, que "se preguntan si alguien alguna vez será capaz de admitir en público sus palabras sagradas".
Budde ha asegurado que los estadounidenses afroamericanos están "demandando con razón el final de 400 años de racismo sistemático y de supremacía blanca en nuestro país". "Solo quiero que el mundo sepa que nosotros en la Diócesis de Washington, siguiendo a Jesús y su forma de amar, nos distanciamos del lenguaje incendiario de este presidente", ha afirmado.
La obispa de la Diócesis episcopaliana de Washington ha hecho hincapié en que su congregación sigue a las personas que viven una vida de "no violencia y amor sacrificado". "Nos alineamos con los que buscan justicia por la muerte de George Floyd y otros incontables", ha subrayado. "Simplemente no puedo creer lo que han visto mis ojos", ha añadido.
Desde su cuenta de Twitter, la obispa ha censurado además que Trump haya autorizado el uso de gases lacrimógenos para despejar la plaza que separa la Casa Blanca de la iglesia y poder llegar así hasta el templo para posar ante las cámaras.
Por su parte, el primado de la Iglesia Episcopaliana, el obispo Michael Curry, ha criticado a Trump por haber utilizado la biblia "con propósitos partidistas". "Por el bien de George Floyd, por todos los que han sufrido por error y por el bien de todos, necesitamos líderes que nos ayuden a ser una nación sometida a Dios con libertad y justicia para todos", ha señalado.
Desde Twitter, el padre jesuita James Martin ha dejado claro su rechazo al posado del presidente con la Biblia. "Déjenme ser claro. Esto es repugnante. La Biblia no es un atrezo. Una iglesia no es un fondo fotográfico. La religión no es una herramienta política. Dios no es su juguete", ha escrito el padre Martin, acompañando su mensaje con la foto de Trump en la iglesia episcopaliana.
Trump ha posado en la iglesia con la Biblia acompañado por su asesor de Seguridad Nacional, Robert O'Brien, el fiscal general, William Barr, su yerno y asesor Jared Kushner, su jefe de Gabinete, Mark Meadows, el secretario de Defensa, Mark Esper, y su jefa de prensa, Kayleigh McEnany. El mandatario ha permanecido ante el templo unos minutos y luego ha vuelto a la Casa Blanca.
La obispa Budde ha criticado que Trump haya exhibido la Biblia durante su visita. "Deje que sea clara: El presidente ha usado solo la biblia, el libro más sagrado de la tradición judeocristiana y una de las iglesias de mi diócesis sin permiso como telón de fondo para un mensaje opuesto a las enseñanzas de Jesús", ha asegurado.
El posado de Trump con la Biblia ante una iglesia llega tras casi una semana de manifestaciones en todo el país en protesta por la muerte del ciudadano negro George Floyd a manos de agentes de la Policía cuando estaba siendo detenido en Mineápolis.