MADRID, 19 Jun. (EUROPA PRESS) -
Ocho estados de Estados Unidos han registrado en la última semana máximos históricos de contagio por coronavirus, parte de un total de 23 estados que han registrado repuntes de casos, en medio de un endurecimiento de las medidas de contención entre la población, comenzando por el condado de Orange, en Florida, que ha seguido los pasos de California y ordenado el uso de mascarilla obligatoria.
Arizona, California, Florida, Nevada, Oklahoma, Carolina del Sur, Texas y Utah son los ocho estados que han registrado estos récords. Desde las diferentes gobernaciones se ha argumentado que este crecimiento de los casos se debe al incremento de las pruebas a la población pero apartados como el número de ingresados apuntan a una propagación del virus muy superior a ritmo de pruebas, según expertos consultados por la cadena CNN.
Florida ha promediado, por ejemplo, alrededor de 2.408 casos nuevos por día durante la última semana, aproximadamente un 90 por ciento más que en el período anterior de siete días. El último balance del jueves, no obstante, ha confirmado en torno a 3.200 nuevos contagios en un solo día, cifra sin precedentes desde la declaración de la pandemia.
Ante la gravedad de esta situación, el alcalde del condado de Orange, Jerry Demings, ha firmado una orden ejecutiva que obliga, a partir del sábado, a la protección facial obligatoria en un entorno especialmente crítico.
Al hecho de que buena parte de la población del estado son jubilados procedentes de otros estados, se suma el hecho de que en el condado de Orange se encuentra Orlando, alojamiento de un parque temático Disney y escenario de la reanudación de la temporada de la NBA.
California, otro de los estados más afectados, ha promediado alrededor de 3.387 casos nuevos por día durante la última semana, Texas ha promediado alrededor de 2.657 casos nuevos diarios y Arizona ha registrado una media de 1.740 contagios.
Preocupa especialmente Oklahoma, cuyos casos semanales se han disparado un 140 por ciento. Aunque el estado mantiene su promedio diario en torno a los 250 casos al día, este sábado se convertirá en el escenario de un multitudinario evento del presidente del país, Donald Trump, en la ciudad de Tulsa y donde el uso de mascarilla no es obligatorio, lo que podría originar un nuevo vector de contagios.