MADRID, 10 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Organización de los Estados Americanos (OEA) se ha congratulado de que 222 personas pueden "respirar en libertad" después de que el Gobierno de Nicaragua haya deportado a presos, afirmando que la libertad de los mismos es una demostración de fuerza de la presión internacional con las dictaduras.
Desde este jueves 222 personas pueden "respirar en libertad", según señala la OEA, que asegura que, sin embargo, queda mucho camino por recorrer hasta que todos los nicaragüenses, sin excepción, "puedan disfrutar de nuevo de la libertad en su propio país".
"La libertad de estos presos políticos es también una demostración de que la presión internacional es imprescindible con las dictaduras", se lee en un comunicado de la organización, difundido este jueves.
Asimismo, la OEA ha señalado que las gestiones de la Administración Biden "son un ejemplo de trabajo político efectivo en favor de los Derechos Humanos". Además, ha aplaudido "el papel desempeñado" de Estados Unidos en la operación, que ha acogido a los presos y les ha facilitado el transporte.
El organismo interamericano, sin embargo, ha afirmado que lo ocurrido hoy no es una "liberación", ya que los presos fueron "injustamente encarcelados", torturados y aislados del exterior por pensar, manifestar o escribir sus opiniones contrarias al "régimen" imperante en Nicaragua.
Las personas excarceladas serán ahora condenadas en juicios "sin ninguna garantía", según recuerda la OEA, por supuesta traición a la patria e 'incitación a la violencia, el terrorismo y la desestabilización económica", entre otros presuntos delitos. Además, han sido despojados de su nacionalidad nicaragüense y de todos sus derechos ciudadanos "a perpetuidad". Llegan a Estados Unidos "deportados" desde su propio país.
Por este motivo, la OEA ha pedido que los crímenes contra los ahora expresos no queden impunes y que sus derechos sean restituidos "a la mayor brevedad posible", trayendo al presento a todas las personas que todavía siguen siendo encarceladas y torturadas en el país centroamericano.
"El régimen de Nicaragua sigue siendo ajeno a los principios de la democracia y el respeto a los Derechos Humanos, y tenemos que seguir denunciando sus atropellos", ha sostenido el ente.
En este sentido, ha remachado que el camino para Nicaragua "es claro", subrayando la importancia de que retorne "a la democracia, a la institucionalidad democrática, al respecto a los derechos fundamentales de los y las nicaragüenses y convocar elecciones libres y justas, con observación internacional".