MADRID, 12 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) ha lamentado este lunes la muerte de 27 migrantes procedentes presuntamente de Etiopía cuyos cuerpos fueron hallados sin vida, asfixiados y arrojados posiblemente desde un camión, a las afueras de la capital de Zambia, Lusaka.
"Esta última tragedia en las afueras de la capital de Zambia, Lusaka, pone de relieve la necesidad urgente de abordar los problemas de la migración irregular, incluso mediante una respuesta transnacional al tráfico ilícito de migrantes y la trata de personas a lo largo de la Ruta Meridional, que va desde el Cuerno de África hacia el África meridional", ha indicado en un comunicado.
En este sentido, ha recordado que esta "red de contrabandistas y traficantes" pone "en peligro" las vidas de los migrantes, que además de pasar por los "peligros naturales" de la propia ruta --transportes inseguros, explotación y otros abusos-- se enfrentan a la detención, la violencia e incluso la muerte.
"Según el Proyecto Migrantes Desaparecidos, más de 900 etíopes han muerto en rutas migratorias desde 2014, incluido este último incidente. África es la segunda región más mortífera para las personas en movimiento, con más de 9.000 muertes durante la migración documentadas en el continente desde 2014", han resaltado, agregando que estas cifras podrían ser mayores.
Con todo, la OIM ha instado "a los gobiernos a lo largo de la ruta a mejorar la cooperación regional para garantizar la seguridad y protección de los migrantes, independientemente de su condición y en todas las etapas de sus viajes".
A tenor de los documentos que llevaban consigo, se cree que los 27 migrantes procedían de Etiopía y atravesaban territorio zambiano, como escala en un trayecto muy común, el que realizan personas procedentes en su mayoría del Cuerno de África que quieren llegar a Sudáfrica.
Hay que recordar que, en la vecina Malaui, las autoridades descubrieron en octubre 25 cuerpos de inmigrantes etíopes en un fosa común. La Policía malauí hizo saber en ese momento que tenía pruebas para vincular al hijastro del ex presidente, Peter Mutharika, con este crimen.
Zambia, con sus 18 millones de habitantes, lleva años luchando contra el tráfico ilegal de seres humanos. Según la agencia de refugiados de la ONU, ACNUR, Zambia ha acogido a más de 105.000 refugiados de países vecinos como Congo, Burundi, Angola y Ruanda.