La agencia de la ONU subraya las dificultades logísticas para ofrecer asistencia por lo remoto de la zona
LONDRES, 18 (Reuters/EP)
El brote de ébola declarado en República Democrática del Congo (RDC) y que afecta a una veintena de personas se encuentra en una zona extremadamente remota y representa un alto riesgo a nivel nacional, ha advertido este jueves la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En una actualización sobre el brote, que se confirmó la semana pasada, la agencia de la ONU ha indicado que hay dos casos confirmados y 18 sospechosos de la peligrosa enfermedad hemorrágica, mientras que se han registrado tres muertes.
El director ejecutivo para emergencias sanitarias de la OMS, Peter Salama, ha señalado que la evaluación de riesgo sobre el brote realizada por la agencia considera que es alto a nivel nacional, medio a nivel regional y bajo a nivel global.
"No podemos subestimar los retos logísticos y prácticos asociados con esta respuesta en una parte muy remota e insegura del país", ha incidido. "Por ahora, no conocemos el pleno alcance del brote y a medida que despleguemos equipos en las próximas semanas, comenzaremos a entender (...) exactamente a lo que nos enfrentamos", ha subrayado Salama en un briefing telefónico.
El responsable de la OMS ha señalado que la prioridad inmediata será localizar a los alrededor de 400 contactos registrados de los casos confirmados y sospechosos.
Este último brote de ébola es el octavo que registra RDC, el país con más epidemias por esta fiebre hemorrágica mortal que se detectó precisamente por primera vez en sus densos bosques tropicales en 1976 y fue bautizada por el cercano río Ébola.
La OMS ha indicado que el brote está centrado en la zona sanitaria de Likati, en la remota provincia de Bas-Uele, en el noreste del país y cerca de la frontera con República Centroafricana. Salama ha descrito la zona como aislada y de difícil acceso, con pocas carreteras asfaltadas y virtualmente sin telecomunicaciones en funcionamiento.
USO DE UNA VACUNA
Preguntado sobre el potencial uso de una vacuna experimental, Salama ha dicho que la logística es "compleja" pero que la OMS está trabajando con el Gobierno congoleño y las autoridades. La vacuna, conocida como rVSV-ZEBOV y desarrollada por Merck, aún no cuenta con licencia pero ha mostrado alta protección contra el ébola en ensayos clínicos publicados el pasado diciembre.
Para usar la vacuna, Salama ha indicado que la OMS necesitaría un protocolo aprobado firmado por los reguladores, el Gobierno y los comités de ética, así como la logística para obtener un consentimiento informado de todos aquellos a los que se les ofreciera y transportarla y almacenarla a los menos 80 grados centígrados que requiere.
"En una zona sin telecomunicaciones, sin acceso por carreteras, sin electricidad a gran escala, esto va a ser un reto enorme", ha reconocido. "Pero estamos comprometidos a trabajar con (...) las agencias socias para realizar una campaña de vacunación si el Gobierno (congoleño) nos da luz verde", ha asegurado.
El ministro de Salud Pública congoleño, Oly Ilunga Kalenga, y el representante de la OMS en RDC, Allarangar Yokouidé, viajaron este miércoles a Nambwa, epicentro del brote, en el distrito de Likati, para conocer de primera mano la situación. El brote está localizado en la provincia de Bas-Uélé, situada a 1.400 kilómetros de Kinshasa, en el norte del país y fronteriza con República Centroafricana.
El primer caso de ébola fue un hombre de 39 años que acudió a un centro médico el 22 de abril con fiebre alta, astenia, vómitos, diarrea sangrienta y otros síntomas. Inmediatamente fue trasladado a una instalación en Likati, pero murió en el camino
El 24 de abril, el motociclista que trasladó al primer enfermo y otra persona que le atendió durante el traslado desarrollaron un cuadro febril. Ambos fallecieron posteriormente.