MADRID 4 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha anunciado este lunes la entrega de más de once toneladas de material médico en el área de Qamishli, en el noreste de Siria, a través de lanzamientos aéreos.
En su comunicado, ha detallado que unas 550.000 personas, de las cuales 30.000 son desplazados, necesitan asistencia humanitaria en esa zona del país, que llevaba desde diciembre sin recibirla.
Entre los suministros entregados en estos lanzamientos figuran antibióticos, analgésicos, kits para tratar quemaduras, sillas de ruedas y equipos médicos.
Por otra parte, el portavoz de la OMS, Tarik Jasarevic, ha resaltado las complicadas condiciones sanitarias que sufren los habitantes en la parte oriental de la ciudad de Alepo, controlada por los rebeldes.
"Las autoridades sanitarias locales nos informan que tienen más de mil personas heridas desde la escalada del conflicto la última semana de septiembre", ha dicho.
"La capacidad de atender a los heridos es reducida ya que muchos de los hospitales fueron alcanzados por los ataques, y hay falta de materiales, personal sanitario y menos de 30 doctores en esa parte de la ciudad", ha remachado.
El vicesecretario general de la ONU para Asuntos Humanitarios, Stephen O'Brien, ha expresado su "alarma" por los continuos bombardeos que está sufriendo esta zona de Alepo, objetivo de la ofensiva de las fuerzas gubernamentales sirias, advirtiendo de que el sistema sanitario de la región está "a punto de hundirse".
"El sistema sanitario está a punto de hundirse por completo con pacientes que no reciben medicamentos ni siquiera para tratar las enfermedades más comunes", dijo.
"Ante la escasez de agua potable y comida, el número de personas que necesitan evacuaciones médicas urgentes probablemente aumentará dramáticamente en cuestión de días", añadió.
Mientras, continúa la ofensiva de las fuerzas gubernamentales con el apoyo de la aviación rusa y de milicias afines a Irán. El Observatorio Sirio para los Derechos Humanos y la televisión estatal han informado del avance de las fuerzas afines al presidente, Bashar al Assad, desde el campo de refugiados de Handarat, al norte de Alepo, hacia la zona industrial de Shuqaif.