La cifra de hospitalizaciones podría llegar a los 5,5 millones, en un continente con nueve camas de UCI por cada millón de habitantes
MADRID, 8 May. (EUROPA PRESS) -
El brote mundial de coronavirus se ha saldado por el momento en África con algo más de 2.000 fallecidos, pero la Organización Munidal de la Salud (OMS) teme que las cifras suban drásticamente si no se toman las medidas adecuadas durante estos próximos meses, hasta el punto de pronosticar entre 83.000 y 190.000 fallecidos en el primer año.
Así, si las medidas de contención fallan, entre 29 y 44 millones de personas podrían contagiarse en el continente más pobre del planeta, marcado entre otras lacras por un débil sistema sanitario y la falta en numerosas zonas de redes básicas de higiene y saneamiento.
El estudio, elaborado a partir de 47 países que suman más de mil millones de habitantes, predice aun así una menor tasa de transmisión que en otras partes del mundo y un menor grado de incidencia y mortalidad, entre otros factores por la juventud de la población, los factores medioambientales o el control ya existente frente a otras enfermedades transmisibles.
Esta menor transmisión tiene también otra cara, ya que hace temer que el brote se prolongue durante varios años. El director de la OMS para África, Matshidiso Moeti, ha advertido de que, "aunque la COVID-19 no se extenderá de forma exponencial como en otras partes del mundo, probablemente estallará en focos de transmisión".
La pandemia, ha añadido, "podría convertirse en un añadido a nuestras vidas durante los próximos años si los gobiernos de la región no toman medidas proactivas". Esto pasa, según Moeti, por "hacer pruebas, vigilar, aislar y tratar" a los potenciales enfermos que se vayana detectando.
FRÁGIL SISTEMA SANITARIO
La pandemia supondrá un desafío en términos generales para el conjunto del sistema sanitario africano, ya que la OMS prevé que se requieran entre 3,6 y 5,5 millones de hospitalizaciones, de las cuales entre 82.000 y 167.000 corresponderán a pacientes necesitados de oxígeno. Entre 52.000 y 107.000 precisarán respiradores.
Sin embargo, de media, en los 47 países apenas hay nueve plazas en cuidados intensivos por cada millón de habitantes y, en términos generales, el acceso del conjunto de la población a instalaciones médicas es "muy bajo", por lo que "muchas personas no tendrán siquiera la oportunidad de conseguir la atención necesaria".
Esta falta de asistencia puede provocar que "enfermedades que se tratarían fácilmente se compliquen", por lo que desde la OMS han instado a las autoridades a ampliar la atención primaria de salud y garantizar que los sistemas sanitarios incluyen también las urgencias.
"La importancia de promover medicas de contención efectiva es más crucial que nunca, ya que la transmisión sostenida y extendida del virus podría afectar gravemente a nuestros sistemas sanitarios", ha dicho Moepti, que ha llamado a actuar antes de que sea demasiado tarde.
"Contener un brote a gran escala es mucho más costoso que las actuales medidas preventivas que están tomando los gobiernos para contener la expansión del virus", ha apostillado.