La OMS inicia campaña de vacunación para evitar brotes de sarampión y polio entre supervivientes del tifón


MANILA, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -

La Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Gobierno filipino han lanzado una campaña de vacunación para evitar brotes de sarampión y polio entre los supervivientes del tifón 'Yolanda', que ha dejado más de 5.200 víctimas mortales en el país.

Según la representante de la OMS en Filipinas, Julie Hall, grandes cantidades de menores no vacunados o que no tienen su cartilla de vacunación al día corren el riesgo de contraer y propagar enfermedades infecciosas como el sarampión, especialmente en las "congestionadas zonas donde viven las personas que se han quedado sin casa". "El sarampión puede ser mortal, especialmente entre los niños pequeños", ha advertido.

La campaña está encaminada a niños en las zonas más afectadas por el tifón, comenzando por los centros de evacuación en la ciudad de Tacloban, la más afectada, y en los centros de recepción en Cebú, segunda ciudad del país y donde se han trasladado algunas familias desplazadas.

Según el comunicado de la OMS, los menores de cinco años están siendo vacunados contra la polio y el sarampión, y se les está suministrando vitamina A para reforzar su sistema inmunológico.

Dado que los más pequeños son los más vulnerables, la fase inicial de la campaña está encaminada a niños de entre 6 meses y 5 años en las regiones más afectadas por el tifón, mientras que se prevé ampliarla a niños de hasta 15 años si los recursos lo permiten, según la OMS.

"Nuestro sistema está golpeado pero no roto", ha subrayado por su parte, el ministro de Sanidad filipino, Enrique Ona. "Con el apoyo de socios, las vacunaciones se han puesto en marcha en un momento vital", ha resaltado.

Un equipo de 20 enfermeras voluntarias se trasladará este fin de semana a Tacloban para apoyar a los trabajadores sanitarios locales. Por su parte, la OMS está trabajando con sus socios para gestionar el reparto de las vacunas empleando frigoríficos por gas o generadores, congeladores, cajas de frío y otros envases a las zonas en las que no hay electricidad. Esta "cadena de frío" es necesaria para evitar que se estropeen las vacunas.