La organización cifra en 382 los muertos en la localidad por "envenenamientos" y "falta de atención sanitaria"
MADRID, 13 Nov. (EUROPA PRESS) -
Una organización no gubernamental sudanesa ha elevado a cerca de 400 los muertos en una ciudad del estado de Gezira (centro) que se encuentra sitiada desde hace semanas por las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), en el marco de la guerra desatada en abril de 2023 en el país africano.
La Conferencia de Gezira, un grupo de la sociedad civil sudanesa, ha indicado en un comunicado publicado en su cuenta en la red social Facebook que un total de 382 personas han fallecido en Al Hilaliya a causa de "envenenamientos y falta de atención sanitaria".
Así, ha apuntado que durante la jornada del lunes murieron 23 personas, entre ellas seis niños, en medio del agravamiento de la situación en la cercada ciudad, situada unos 70 kilómetros al noreste de la capital de Gezira, Uad Madani.
Fuentes locales citadas por el grupo Nida al Uasat han acusado a las RSF de envenenar el agua potable y distribuir comida envenenada con fertilizantes y mercurio, según ha recogido el portal sudanés de noticias Sudan Tribune.
La organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) acusó el lunes al grupo paramilitar de asesinatos, detenciones ilegales y violaciones durante sus ataques en el estado de Gezira, motivo por el que insistió en la necesidad de que Naciones Unidas despliegue una misión para proteger a la población civil.
Las RSF tomaron en diciembre de 2023 el control de la capital de Gezira, Uad Madani, perpetrando desde entonces graves abusos de los Derechos Humanos, incluidos asesinatos, secuestros y violencia sexual. Los ataques han aumentado a raíz de la deserción el 20 de octubre del líder del grupo para Gezira, Abú Aqla Kikil.
Sudán se encuentra sumido en una guerra civil a raíz de las hostilidades que estallaron en abril de 2023 en el marco de un aumento de las tensiones en torno a la integración de las RSF en el seno de las Fuerzas Armadas, parte clave de un acuerdo firmado en diciembre de 2022 para formar un nuevo gobierno civil y reactivar la transición abierta tras el derrocamiento en 2019 de Omar Hasán al Bashir, dañada por el golpe de Estado de octubre de 2021, en el que fue derrocado el entonces ministro de transición, Abdalá Hamdok.