La ONU advierte de que un acuerdo de deportaciones entre Rusia y Corea del Norte amenaza a los desertores

SEÚL, 26 Nov. (Reuters/EP) -

La ONU ha afirmado este jueves que un acuerdo de extradición firmado por Rusia y Corea del Norte podría haber sido firmado con el objetivo de deportar a los desertores poniéndoles en serio riesgo, ha asegurado el investigador de Derechos Humanos de Naciones Unidas de Corea del Norte, Marzuki Darusman.

Darusman ha informado de que nueve ciudadanos de Corea del Norte que fueron arrestados en Vietnam están bajo custodia china y ha afirmado que pronto podrían ser repatriados. "Estoy decepcionado tras saber que Rusia ha firmado este acuerdo de extradición con Corea del Norte", ha declarado Darusman a través de un comunicado.

"A pesar de que Rusia ha dicho que este acuerdo no se utilizará para deportar a cualquier refugiado en riesgo de persecución, estoy muy preocupado ya que el pacto podría facilitar la repatriación de los asilados de Corea del Norte. Esto podría provocar que los desertores pudieran estar en riesgo de sufrir violaciones y torturas", ha asegurado.

Rusia y Corea del Norte llegaron a un acuerdo hace un año para permitir la deportación de los refugiados ilegales que se encuentran fuera de sus países en un período de 30 días.

Una investigación puesta en marcha por la ONU el año pasado informó de que los norcoreanos repatriados forzosamente a Pyongyang son torturados, detenidos, ejecutados o agredidos sexualmente, según informó la semana pasada la portavoz de Derechos Humanos de la ONU, Ravina Shamdasani.

Obligar a los refugiados a que retornen al país donde están siendo perseguidos está prohibido bajo los tratados internacionales firmados por China, pero Pekín cree que aquellos que huyen de Corea del Norte son inmigrantes que llegan al país solamente por razones económicas.

Un comité de la Asamblea General de la ONU condenó la semana pasada los abusos incontrolados y planeados de los Derechos Humanos en Corea del Norte. También se refirió a las afirmaciones del Consejo de Derechos Humanos de la ONU que apuntaban a que los abusos en Corea del Norte podrían ser crímenes contra la Humanidad.

Corea del Norte rechazó esta resolución afirmando que se trataba de un complot político de Estados Unidos y de "otras fuerzas hostiles que están en contra de Corea del Norte".