Guterres dice que "la desesperación, la pobreza y el hambre" crean "un terreno fértil" para la expansión de los grupos terroristas
MADRID, 29 Mar. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha alertado de que la amenaza del terrorismo "es especialmente preocupante" en África debido a que "la desesperación, la pobreza y el hambre", entre otros elementos, crean "un terreno fértil" para la expansión de los grupos terroristas.
"La desesperación, la pobreza, el hambre, la falta de servicios básicos, el desempleo y los cambios inconstitucionales de gobierno siguen suponiendo un terreno fértil para la creciente expansión de grupos terroristas para infectar nuevas partes del continente", ha señalado Guterres.
"Estoy profundamente preocupado por los avances logrados por grupos terroristas en el Sahel y otras partes. Comunidad por comunidad, están intentando extender su alcance", ha alertado, antes de agregar que "el rastro de terror está aumentando, con combatientes, fondos y armas fluyendo cada vez más entre regiones y en todo el continente".
Así, ha recalcado que "se están forjando nuevas alianzas con grupos de crimen organizado y piratas", mientras que "el mundo 'online' da una plataforma global para la propagación de ideologías violentas". "Ninguna edad, cultura, religión, nacionalidad o religión es inmune, pero la situación en África es especialmente preocupante", ha sostenido.
Guterres ha explicado que "el terrorismo refuerza su dominio al buscar y explotar las debilidades y la inestabilidad en sistemas políticos, económicos y de seguridad, aprovechándose de los miedos y las vulnerabilidades de las personas que se enfrentan a la pobreza extrema, el hambre y la hambruna".
De esta forma, ha dicho que estos grupos "explotan las desigualdades y la exclusión social para agravar las tensiones" y ha añadido que "comercian con los males eternos de los prejuicios y la discriminación dirigidos a grupos, culturas, religiones y etnias específicos" mientras participan en "actividades criminales como el blanqueo de dinero y la minería ilegal, el tráfico de armas, drogas, minerales preciosos, antigüedades y seres humanos".
"Promueven las mentiras, el odio y la desinformación en el ciberespacio. Mantienen a las mujeres y las niñas bajo una nube constante de intimidación, así como de violencia sexual y de género. Ignorar o se saltan el Estado de Derecho", ha denunciado el secretario general de Naciones Unidas.
Sin embargo, Guterres ha explicado que "igual que el terrorismo aleja a las personas, hacerle frente puede unir a los países". "Vemos esto en África, que acoge varias iniciativas regionales contra el terrorismo y esfuerzos conjuntos en el Sahel, la cuenca del lago Chad, Mozambique y más allá", ha destacado.
Así, ha hecho hincapié en la "renovada determinación de los líderes africanos a la hora de hacer frente a esta amenaza en desarrollo" y ha aseverado que "la ONU está junto a África para acabar con esta lacra, lo que incluye la guía política, asistencia técnica y apoyo a los regimenes de sanciones por parte del Consejo de Seguridad".
"Ante todo, incluye nuestra colaboración cercana con la Unión Africana (UA) y las organizaciones regionales y subregionales de África. Estamos dando asistencia personalizada a estados miembro africanos, incluidas las áreas de prevención, asistencia legal, investigación, enjuiciamiento, reintegración, rehabilitación y protección de los Derechos Humanos", ha dicho.
Por ello, ha reclamado a los estados miembro del organismo internacional que apoyen "este trabajo vital" y ha abogado por "encontrar nuevas vías para hacer frente de forma más efectiva a condiciones estructurales que crean un terreno fértil para la propagación del terrorismo".
Guterres ha reseñado que "es necesario colocar los Derechos Humanos en el centro de estos esfuerzos" y ha incidido en que "el terrorismo representa la negación y la destrucción de los Derechos Humanos". "La lucha contra él nunca tendrá éxito si perpetuamos la misma negación y destrucción", ha manifestado.
De esta forma, ha recordado que "las pruebas demuestran que los esfuerzos antiterroristas que se centran únicamente en la seguridad, en lugar de en los Derechos Humanos, pueden incrementar de forma involuntaria la marginación y la exclusión, lo que empeora aún más la situación".
"La propuesta de Nueva Agenda para la Paz establece una postura holística y exhaustiva para construir sociedades más pacíficas y estables en las que el terrorismo y el extremismo violento no tengan cabida, a través de la prevención y abordando las situaciones económicas y sociales que puedan llevar al terrorismo", ha argumentado.
El secretario general ha reiterado que "esto pasa por la inclusión, garantizando que las estrategias antiterroristas reflejan las experiencias de todas las comunidades, especialmente las minorías, las mujeres y los jóvenes, colocando siempre los Derechos Humanos y el Estado de Derecho en el centro de lo que se hace".