MADRID, 20 May. (EUROPA PRESS) -
La mitad de la población de República Centroafricana (RCA) se encuentra en situación de emergencia por la inseguridad alimentaria, ha alertado este miércoles Naciones Unidas, una situación que se ve agudizada por los conflictos en la nación y el impacto de la pandemia de coronavirus, mientras "se prepara para otra dura temporada de escasez entre mayo y agosto".
La Organización de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) y el Programa Mundial de Alimentos de Naciones Unidas (PMA) han informado de que el 47 por ciento de la población del país sufre una elevada y creciente inseguridad alimentaria aguda, lo que supone más de 2,2 millones de personas --la mayoría de las cuales viven en zonas rurales--.
En este contexto, "necesitan ayuda urgente para evitar la pérdida de vidas y medios de subsistencia", según el análisis de la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria (CIP) publicado este miércoles.
Un tercio de la población --más de 1,6 millones de personas-- está en situación de crisis, lo que implica "saltarse las comidas por completo o vender lo poco que tienen para comprar alimentos", mientras que más de una décima parte --más de 630.000 personas-- están en situación de emergencia, lo que significa que tienen que "vender su último animal o su última fuente de sustento, sacar a sus hijos de la escuela o recurrir a la mendicidad".
Además, en República Centroafricana, la temporada de escasez --entre mayo y agosto-- coincide con la principal época de cultivo y producción de hortalizas, y es la temporada en la que suelen escasear los alimentos antes de que llegue la cosecha, por lo que la situación podría empeorar.
La población del país "lleva una década soportando el peso del conflicto, y la inseguridad alimentaria ha ido en aumento durante los últimos años", aunque "nunca antes el panorama de la inseguridad alimentaria había sido tan grave", ha alertado la representante de la FAO en RCA, Perpetua Katepa-Kalala.
Debido a la pandemia, las fronteras y los mercados siguen cerrados o restringidos "lo que dificulta el flujo de alimentos y hace subir su precio", y "pronto llegará la temporada de escasez y las lluvias harán inutilizables las carreteras de tierra del país", por lo que "la entrega de alimentos, semillas para la siembra y otros suministros esenciales va a ser más difícil".
Ante esto, hay que "romper el círculo vicioso del conflicto y el hambre en República Centroafricana", ya que "nunca antes habíamos visto a tanta gente al borde de la supervivencia: más de medio millón de personas están a un paso de la hambruna", frente a lo que hay que "actuar urgentemente para salvar vidas antes de que sea demasiado tarde", ha pedido la directora adjunta del PMA en el país, dijo Aline Rumonge.
Para hacer frente a la situación, la FAO necesita 31,5 millones de dólares para ayudar a 970.000 personas vulnerables en 2021, mientras que el PMA necesita 54,9 millones de dólares hasta septiembre de 2021 para seguir proporcionando asistencia alimentaria y nutricional que salva vidas a casi un millón de personas afectadas por la crisis en el país.