MADRID 13 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Misión de Asistencia de Naciones Unidas para Irak (UNAMI, por sus siglas en inglés) ha alertado este lunes del "terrible daño" que el Estado Islámico está causando en la población civil --con al menos 15.000 muertos y 30.000 heridos desde enero de 2014-- y del clima generalizado de violaciones a los Derechos Humanos en el país.
En un informe en el que también ha colaborado la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACDH) se han hecho públicos varios datos del conflicto desde diciembre de 2014 a abril de 2015. El texto ha sido elaborado basándose en investigaciones y testimonios de víctimas y testigos.
La ONU ha mostrado su preocupación por la población civil que reside en zonas controladas por el grupo terrorista y ha recordado que los que se oponen a la ideología de los yihadistas "han sido secuestrados o asesinados de forma sistemática".
La situación de los que pertenecen a comunidades étnicas o religiosas minoritarias tampoco es mucho mejor. Según la ONU, 3.500 miembros de la comunidad yazidí continúan en manos de los terroristas y sufren a diario abusos físicos y sexuales. El informe también subraya la persecución del Estado Islámico a los civiles sospechosos de ser homosexuales. El 8 de marzo dos individuos acusados de homosexualidad y blasfemia fueron decapitados por el grupo yihadista.
El reclutamiento forzado de niños también es algo que preocupa a Naciones Unidas. Muchos niños son llevados a campamentos militares en Siria, donde se les enseña a utilizar armas de fuego y a tratar a los prisioneros. La ONU ha asegurado que muchos de estos actos son violaciones de la ley internacional y algunos podrían definirse como crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad o incluso genocidio.
Naciones Unidas también ha recordado las violaciones cometidas por las fuerzas de seguridad iraquíes, incluyendo ataques aéreos y bombardeos que podrían poner en peligro a la población civil. Según el informe, los analistas de la ONU aún no tienen claro el control que tiene el Gobierno iraquí sobre las fuerzas asociadas.
El representante de la Secretaría General de la ONU para Irak, Jan Kubis, ha instado a las partes del conflicto a respetar las leyes internacionales y humanitarias para prevenir abusos a la población civil.
LA MASACRE DE SPEICHER
El informe de la ONU contiene también un anexo en el que analiza en profundidad el incidente del 12 de junio de 2014 en el campamento de Speicher, en el que 1.700 cadetes perdieron la vida a manos de terroristas del Estado Islámico.
Los yihadistas condujeron a los soldados a un lugar cerca del antiguo palacio presidencial de Tikrit en un valle cercano a un río, donde fueron "disparados sistemáticamente", según el informe. El texto cita a un entrevistado que asegura "haber visto una pila de cuerpos decapitados en un baño" en el palacio de Tikrit.
"La magnitud y brutalidad de la masacre del campamento Speicher fue algo excepcional", según ha manifestado el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Raad al Hussein, que ha valorado el "coraje" de los supervivientes y de los familiares de las víctimas por negarse a que se olvide lo sucedido.
Zeid ha pedido a las autoridades que aseguren la imparcialidad y la independencia de cualquiera de los juicios en relación con la masacre y que se respete la legalidad internacional.