MADRID, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
La enviada especial de la ONU para Birmania, Noeleen Heyzer, ha resaltado este martes con motivo del primer aniversario del golpe de Estado en el país asiático que la junta militar debe "formar parte de las conversaciones" si bien una solución pacífica no podrá estar encabezada por el régimen.
"Cuando digo que el Ejército no es legítimo no digo que no tengan papel alguno. Tienen un papel legítimo pero no son el Gobierno legítimo en este momento", ha aseverado Heyzer durante una entrevista con la cadena de televisión CNA.
Así, ha defendido que la junta sea consultada y forme parte de las conversaciones a pesar de que el Gobierno Nacional de Unidad --creado de forma paralela por grupos opositores al régimen-- ha pedido que los militares queden totalmente excluidos del proceso.
Desde que se produjo el golpe militar hace un año, más de 1.500 personas han muertos y al menos 12.000 han sido encarceladas, según datos de varias ONG. Además, la pobreza ha aumentado en el país a medida que crece la violencia y se ha producido el cierre de empresas y fábricas.
"Estas masacres irán a peor a menos que encontremos la manera de detener esto", ha dicho la enviada de Naciones Unidas, que ha recalcado la importancia de que el Ejército "forme parte" de futuras conversaciones.
No obstante, ha instado a los activistas que protestan contra las Fuerzas Armadas --conocidas como Tatmadaw-- a "moderar" su postura y pensar "a largo plazo". "Sé que mucha gente, especialmente los jóvenes, están dispuestos a morir por una transformación política real", ha aseverado.
"Cualquier cambio de este tipo requiere un proceso y no va a pasar de un día para otro, por lo que quiero que tengan algo por lo que vivir, no algo por lo que morir", ha afirmado.
Por otra parte, ha hecho un llamamiento para lograr una "pausa" y facilitar la asistencia humanitaria como primer paso para acabar con la violencia y ha destacado la importancia de un alto el fuego definitivo.
"Desafortunadamente son civiles los que quedan atrapados en medio de este conflicto. Actualmente 25 millones de personas se encuentran por debajo del umbral de la pobreza y 14,4 millones necesitan ayuda humanitaria", ha lamentado antes de insistir en que la gente "necesita resultados concretos para mejorar su calidad de vida".