MADRID, 11 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Turk, ha asumido que la mayor parte de la población del Sahel "lucha para sobrevivir todos los días" y ha llamado a atajar las causas que subyacen tras esta emergencia, advirtiendo de que "los cambios de gobiernos inconstitucionales no son la solución".
Turk, que ha hablado este lunes ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, ha recordado que países como Burkina Faso, Chad, Malí y Níger, escenario de revueltas en los últimos años, figuran "entre los ocho países menos desarrollados del mundo" y sufren además los efectos del cambio climático, "una crisis a la que no han contribuido".
"Los recursos que se necesitan para la supervivencia, como tierra fértil y agua, disminuyen, lo que deriva en un conflicto entre comunidades", ha explicado Turk, apuntando otra de las múltiples derivadas de los desastres naturales, catalizador a su vez de violencia.
La ayuda internacional para atender la actual emergencia va, a su juicio, "demasiado lenta", pese a que 2022 ya fue "el año más mortífero en el Sahel desde que comenzó la crisis hace una década" y a que la actividad de grupos armados amenaza con expandirse hacia países de la costa occidental de África.
Frente a estos retos, el Alto Comisionado ha reclamado más y mejor gobernanza. "Necesitamos una vuelta urgente de los gobiernos civiles y espacios abiertos donde las personas puedan participar, influir, acompañar y criticar las acciones del Gobierno o la falta de acción", ha remachado, sin aludir a ningún país en concreto durante su discurso.