MADRID, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -
La Misión de Apoyo de Naciones Unidas en Libia (UNSMIL) ha condenado firmemente este domingo la ofensiva militar encabezada por Jalifa Haftar en la localidad de Benghazi (este), afirmando que la misma "tiene como objetivo minar los esfuerzos para poner fin al conflicto".
"Benghazi ha sufrido desde hace demasiado. Demasiados civiles han muerto o han resultado heridos y más de 100.000 se han visto desplazados por el conflicto, que se extiende desde hace más de un año", ha indicado en su comunicado.
"Barrios residenciales han sido reducidos a escombros. La última ofensiva aérea añadirá sufrimiento a la población en un momento en el que se preparan para celebrar el Eid al Adha (Celebración del Sacrificio)", ha agregado. Así, la UNSMIL ha apuntado que "esta última escalada les negará probablemente la esperanza de celebrar la fiesta en paz y calma".
En este sentido, la misión ha manifestado que "los acontecimientos sobre el terreno durante el último año han demostrado claramente que la solución militar no es una opción viable en Libia".
"Ya sea en Benghazi o en cualquier otra parte del país, las hostilidades armadas han mostrado una y otra vez que sólo pueden traer destrucción y sufrimiento al pueblo libio", ha recalcado.
Por ello, ha insistido en que los bombardeos "son un claro intento de minar y descarrilar los esfuerzos para poner fin al conflicto, en un momento en el que las negociaciones han entrado en su fase final y vital".
"La única solución debe salir del marco del proceso de diálogo y un acuerdo político que garantice la inclusión, el equilibrio y el consenso. Las partes en Libia tienen la oportunidad histórica de alcanzar un acuerdo que ponga fin a las divisiones y el sufrimiento y que permita pasar página", ha añadido.
Así, la UNSMIL ha reclamado el fin de las hostilidades en Benghazi y en el este del país, pidiendo a las partes en conflicto que "desistan de cualquier escalada o ataque de respuesta" y que "muestren la máxima moderación para dar una oportunidad al diálogo".
Jaftar anunció el sábado el inicio de una nueva operación con el objetivo declarado de expulsar de la ciudad a los milicianos del grupo yihadista Estado Islámico y otras milicias islamistas. Sin embargo, la misión de la ONU no ha hecho referencia alguna estos grupos extremistas.
La UNSMIL ha guardado silencio por el momento sobre la irrupción de hombres armados el jueves en la sede del Congreso General Nacional (CGN) --el Parlamento del Gobierno autoproclamado en Trípoli-- tras una votación en la que se ha decidido continuar participando en el proceso de diálogo mediado por Naciones Unidas.