Pide al grupo "el cese inmediato de todas las hostilidades" y que "deponga las armas sin condiciones"
MADRID, 23 (EUROPA PRESS)
Naciones Unidas ha condenado los últimos ataques ejecutados por el grupo armado Movimiento 23 de Marzo (M23) contra 'cascos azules' de la Misión de la ONU en República Democrática del Congo (MONUSCO) en el este del país, en el marco del repunte de las hostilidades en esta zona de RDC.
La representante especial de la Secretaría General de la ONU en RDC, Bintou Keita, ha recalcado que "condena con la mayor firmeza" estos ataques y ha detallado que han tenido lugar en Shangi, situado en el territorio de Rutshuru, en la provincia de Kivu Norte.
Así, ha manifestado que los rebeldes del M23 atacaron posiciones del Ejército congoleño en la zona y posteriormente atacaron "de forma deliberada" a 'cascos azules' presentes en la zona, antes de agregar que estos últimos respondieron "en línea con su mandato".
Keita ha hecho hincapié en que "una operación conjunta de las Fuerzas Armadas congoleñas y la MONUSCO fue lanzada para liberar la zona de combatientes del M23, con el objetivo prioritario de defender a los civiles y respetando la política de diligencia relativa a la prevención de violaciones de los Derechos Humanos".
Por ello, ha lamentado los nuevos desplazamientos de población a causa de estos desplazamientos y ha dicho que "la evaluación de las consecuencias de estos ataques sobre las necesidades humanitarias está en marcha, en coordinación con agencias, fondos y programas afectados".
La enviada de la ONU en RDC ha reclamado al M23 "el cese inmediato de todas las hostilidades" y que "deponga las armas sin condiciones" para unirse al programa de desarme, desmovilización y estabilización en la zona, al tiempo que ha aplaudido la "valentía" y "determinación" de los 'cascos azules' ante estos ataques.
Keita ha solicitado además que, pese al "clima y situación de seguridad difícil en la provincia", no se ceda a "las campañas de desinformación contra la MONUSCO y su mandato", por lo que ha recordado que los 'cascos azules' dan "apoyo" al Gobierno y a la población congoleña para "restaurar la paz y la estabilidad en el este del país y apoyar el desarme de todos los grupos armados".
El M23 ha sido acusado desde noviembre de 2021 de llevar a cabo ataques contra posiciones del Ejército en esta zona del país, a pesar de que procedió a su desmovilización hace más de ocho años tras combates con el Ejército.
Las autoridades congoleñas y el M23 firmaron en diciembre de 2013 un acuerdo de paz tras los combates registrados desde 2012 con el Ejército, que contó con apoyo de tropas de Naciones Unidas. Expertos de la ONU acusaron a Uganda y a Ruanda de apoyar a los rebeldes, si bien ambos países lo negaron.
NUEVO ATAQUE DE CODECO
Por otra parte, al menos siete personas murieron el domingo en un ataque perpetrado por la milicia Cooperativa para el Desarrollo de Congo (CODECO) contra tres aldeas en el territorio de Djugu, situado en la provincia de Ituri, también en el este del país.
Fuentes de la sociedad civil citadas por la emisora congoleña Radio Okapi han indicado que más de un centenar de casas fueron incendiadas durante el ataque, perpetrado contra las localidades de Bale, Tsunde y Café, a orillas del lago Alberto.
La presidenta de la sociedad civil en la zona, Charité Banza, ha indicado que una de las víctimas fue decapitada a machetazos y ha agregado que el uso de carreteras se ha visto complicado por la presencia de milicianos entre las localidades de Katoto y Kparangoza.
La milicia fue acusada de matar a principios de mayo a 15 civiles en un ataque contra un campamento de desplazados en la provincia de Ituri, tras la matanza de más de 50 personas en un ataque perpetrado días antes contra una mina de oro en esta misma provincia.
CODECO, que incrementado sus ataques durante los últimos meses tras un parón por un proceso de contactos con las autoridades, está integrada predominantemente por miembros de la comunidad lendu, tras el aumento de los asaltos desde junio de 2019 y los enfrentamientos intercomunitarios entre los lendu y los hema en Ituri.
Las provincias de Ituri y Kivu Norte se encuentran bajo estado de sitio desde mayo de 2021, una medida extendida en abril en medio de una fuerte polémica por supuestos delitos contra la población cometidos por las fuerzas congoleñas y las quejas de políticos locales que no perciben resultados tras casi un año de esta situación.