GINEBRA/PEKÍN, 5 May. (Reuters/EP) -
La Oficina de Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha denunciado este viernes "la continua represión" en China y la detención de abogados y activistas, e insta a las autoridades a que liberen a todos los detenidos por ejercer lo que llaman libertades fundamentales.
La ONU ha expresado su preocupación por la información con respecto al abogado de Derechos Humanos Chen Jiangang, que fue detenido por la Policía este miércoles mientras viajaba junto a su familia en la provincia de Yunnan. Aunque su esposa y sus dos hijos fueron liberados, el abogado se encuentra en paradero desconocido.
Chen es el abogado de Xie Yang, un compañero de profesión que se encuentra bajo custodia desde julio de 2015 y cuyo juicio, según se ha acordado, comenzará la próxima semana. Xie se enfrenta a los cargos de incitación a la subversión y alteración del orden, según ha informado la portavoz de la oficina en Ginebra, Ravina Shamdasani.
"Antes de ser denunciado por la policía este miércoles, Chen expresó en un mensaje de vídeo que también él podría perder su libertad y que podría ser coaccionado para auto inculparse", ha declarado Shamdasani.
"Estamos consternados por este patrón continuo de acoso a los abogados mediante la detención continua, sin garantías de debido proceso, y con la supuesta exposición a los malos tratos y la coerción en la auto incriminación", ha afirmado Shamdasani.
La mayoría de los abogados detenidos estaban en proceso de defensa de diversos aspectos como la economía básica de los ciudadanos y sus derechos sociales y culturales, ha añadido.
Este jueves, decenas de abogados chinos y activistas han clamado por la liberación inmediata de Chen y han trasladado el llamamiento a una carta que está circulando en las redes sociales.
En marzo los medios acusaron a Chen junto a otro abogado de Derechos Humanos, Jiang Tianyong, de realizar un informe detallados sobre la tortura sufrida por Xie Yang, y argumentaron que habían inventado "noticias falsas" para captar la atención de los medios de comunicación internacionales. En ese momento Chen aseguró que lo relatado en el informe era completamente verdad.
Decenas de abogados de Derechos Humanos y diplomáticos extranjeros viajaron a la ciudad de Changsha, en el centro de China, después de conocer que el Xie sería juzgado, pero las autoridades informaron de que el juicio no se produciría. Ese mismo día un tribunal de la ciudad de Tianjin condenó a otro abogado, Li Heping, a tres años de cárcel por subversión.
Desde el año 2015, decenas de personas vinculadas a un bufete de abogados han sido detenidas o procesadas por las autoridades en una represión contra la disidencia. China rechaza sistemáticamente la crítica a su historial de Derechos Humanos y asegura que es un país que se rige según establece la ley.