GINEBRA, 11 (Reuters/EP)
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Raad al Husein, ha denunciado este lunes la "brutal operación de seguridad" puesta en marcha por las autoridades birmanas contra los rohingyas y ha asegurado que ve en la situación "un ejemplo de libro de limpieza étnica".
En su discurso ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, Zeid ha dicho que la operación de seguridad en el estado de Rajine es "claramente desproporcionada" frente a los ataques de insurgentes rohingyas registrados a finales de agosto.
El Alto Comisionado ha asegurado que hay más de 270.000 rohingyas que han huido a Bangladesh, con más desplazados atrapados en la frontera, entre denuncias de quema de aldeas y de asesinatos. "Pido al Gobierno que ponga fin a la cruel operación militar, con rendición de cuentas por todas las violaciones que han ocurrido, y que dé marcha atrás en el patrón de discriminación grave y generalizada contra la población rohingya", ha señalado. "La situación parece un ejemplo de libro de limpieza étnica", ha recalcado.
Desde el 25 de agosto, más de 300.000 musulmanes rohingyas han huido del estado birmano de Rajine a Bangladesh, por la ola de violencia que comenzó con una serie de ataques de milicianos rohingyas contra las fuerzas de seguridad birmanas y una contraofensiva militar que ha dejado al menos 400 muertos.
"Hemos recibido múltiples informes e imágenes vía satélite de las fuerzas de seguridad y de milicias locales quemando aldeas rohingyas y testimonios sólido de asesinatos extrajudiciales, incluidos disparos contra civiles que huyen", ha afirmado el Alto Comisionado de la ONU.
Zeid ha mencionado informaciones que señalan que las autoridades birmanas han comenzado a colocar minas terrestres en lafrontera con Bangladesh y que van a exigir a los refugiados que retornen "pruebas de ciudadanía".
El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha subrayado que los rohingyas llevan décadas despojados de sus derechos civiles y políticos, también de los derivados de la ciudadanía. En 2016, la oficina de Zeid publicó un informe basado en entrevistas a rohingyas que huyeron a Bangladesh por otra operación militar birmana que, según Zeid, ya "sugería" que había ataques "generalizados y sistemáticos" contra los rohingyas, llegando a alcanzar "posiblemente" la consideración de "crímenes contra la Humanidad".
Zeid ha manifestado su condena por las "recientes medidas" adoptadas en India para "deportar" a los rohingyas en un momento en el que se exponen a una violencia en contra esta comunidad en Birmania, al tiempo que ha explicado que en territorio indio hay unos 40.000 rohingyas, incluidos 16.000 que tienen documentación de refugiados.
"India no puede llevar a cabo expulsiones colectivas ni devolver a personas a un lugar en el que sufren riesgo de tortura u otras graves violaciones", ha concluido el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados.