Zeid expresa su preocupación por la intensificación de los combates también en Idlib
MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
El incremento de los bombardeos aéreos y los ataques terrestres por las fuerzas gubernamentales sirias contra el bastión rebelde de Ghuta Oriental, situado en las proximidades de Damasco, se ha cobrado la vida de al menos 85 civiles y ha dejado 184 heridos desde el pasado 31 de diciembre, ha denunciado este miércoles el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Raad al Husein.
"En Ghuta Oriental, donde un devastador asedio ha causado una catástrofe humanitaria, las zonas residenciales están siendo golpeadas día y noche por bombardeos desde tierra y desde el aire, forzando a los civiles a esconderse en los sótanos", ha resaltado.
Según Zeid, que también ha acusado a los rebeldes de disparar cohetes contra zonas residenciales de Damasco, entre los 85 civiles muertos en Ghuta Oriental figuran 21 mujeres y 30 niños. Además, al menos dos instalaciones sanitarias han sido alcanzadas por los bombardeos aéreos en este periodo, cobrándose la vida de un trabajador sanitario.
Según las estimaciones de la ONU, en este enclave bajo control rebelde situado a menos de una hora en coche de Damasco y asediado por las fuerzas de Bashar al Assad están atrapados unos 400.000 civiles.
"El cumplimiento del Derecho Internacional requiere que las partes en un conflicto hagan todo lo posible para proteger a los civiles. Esto incluye distinguir en todo momento entre objetivos militares y civiles", ha recordado el máximo responsable de Derechos Humanos de la ONU.
El hecho de que se estén produciendo víctimas civiles por los bombardeos aéreos, ha destacado Zeid, hace temer que "podrían haberse cometido crímenes de guerra" en Ghuta Oriental. A su vez, ha agregado, "el disparo de cohetes contra zonas pobladas de Damasco en aparente respuesta parece no servir a ningún fin militar y crea terror entre la población civil".
Asimismo, el alto comisionado ha resaltado que el hecho de que no se permita evacuar los casos médicos urgentes del enclave rebelde es contrario al Derecho Internacional Humanitario.
PREOCUPACIÓN POR IDLIB
Por otra parte, Zeid también ha expresado su preocupación por la situación en la provincia de Idlib, donde residen unos dos millones de personas y donde se han intensificado los enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y sus aliados y los grupos rebeldes, incluido Hayat Tahrir al Sham, la coalición que incluye a la antigua filial del Frente al Nusra.
Según el alto comisionado, "los ataques terrestres y bombardeos aéreos" están poniendo en peligro la "seguridad de cientos de miles de civiles", entre los que hay numerosos sirios que llegaron a Idlib procedentes de otras partes del país como Hama y Alepo.
Zeid ha denunciado que la inseguridad y las medidas de represión han empeorado ante los intentos de Hayat Tahrir al Sham de consolidar su control sobre la región, a lo que se suma la intensificación de los combates entre las fuerzas gubernamentales y los milicianos en torno a la ciudad de Idlib, lo que hace temer que los enfrentamientos se extiendan por la provincia.
"El sufrimiento de los sirios no tiene fin", ha lamentado Zeid, reiterando su llamamiento a todas las partes a "garantizar la protección de los civiles de los efectos de las hostilidades y permitan el acceso sin restricciones a las agencias humanitarias para ofrecer la ayuda necesaria", en particular a los residentes de Ghuta Oriental "que viven bajo asedio desde hace cuatro años".