MADRID, 27 Jul. (EUROPA PRESS) -
Naciones Unidas ha subrayado que el ataque perpetrado el martes contra una base de la Misión de la ONU República Democrática del Congo (RDC) en la provincia de Kivu Norte (este), que se saldó con la muerte de un 'casco azul' y dos policías de la misión, podría equivaler a un crimen de guerra, en el marco de las protestas de los últimos días contra las tropas de pacificación en el país africano.
El viceportavoz de la Secretaría General de Naciones Unidas, Farhan Haq, ha indicado que "todo ataque dirigido contra 'cascos azules' podría suponer un crimen de guerra", por lo que ha pedido a las autoridades congoleñas que "investiguen estos incidentes y lleven rápidamente a los responsables ante la justicia".
Así, ha destacado que el secretario general de la ONU, António Guterres, "condena firmemente" el ataque contra la base de la MONUSCO en Butembo y ha trasladado sus "profundas condolencias" a los familiares de las víctimas, identificadas como un 'casco azul' egipcio y dos policías indios.
"El secretario general condena firmemente también la violencia contra múltiples bases de la ONU en Kivu Norte desde el 25 de julio, en las que individuos y grupos entraron por la fuerza y participaron en saqueos y destrucción de propiedades de la ONU, además de saquear e incendiar residencias del personal de Naciones Unidas", ha señalado Haq en un comunicado.
En esta línea, ha subrayado que Guterres también lamenta la muerte de manifestantes y ha reiterado "el compromiso de la MONUSCO para trabajar con las autoridades congoleñas para investigar estos incidentes", al tiempo que ha recordado el acuerdo sobre estatuto de las fuerzas con RDC, que "garantiza la inviolabilidad de las instalaciones de Naciones Unidas".
Por último, ha dicho que Guterres "subraya el firme compromiso de la ONU con la soberanía, independencia, unidad e integridad territorial de RDC". "La ONU, a través de su representante especial en RDC y su misión, con mandato del Consejo de Seguridad de la ONU, seguirá apoyando al Gobierno y al pueblo congoleño en sus esfuerzos para lograr paz y estabilidad en el este del país", ha remachado.
La MONUSCO lleva más de 20 años apostada en el noreste del Congo, en un intento de apuntalar la paz en el país a pesar de la presencia de unos 130 grupos armados que se disputan el control de las vastas riquezas naturales de la RDC, que incluyen cobre, cobalto, oro y diamantes.