MADRID, 11 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un relator de Naciones Unidas ha advertido este lunes de que la suspensión y cese del presidente del Tribunal Supremo de Nigeria supone una violación de los Derechos Humanos en lo relativo a la independencia del sistema de justicia y la separación de poderes.
El Tribunal del Código de Conducta (TCC) de Nigeria ha ordenado que el presidente del Tribunal Supremo, Walter Onnoghen, comparezca el 13 de febrero ante la corte, después de que se negara a presentarse por tercera vez consecutiva a la vista.
Un tribunal rechazó la semana pasada la apelación presentada por Onnoghen contra su enjuiciamiento, tras ser destituido por el presidente, Muhamadu Buhari, a pocas semanas de las elecciones del 16 de febrero, allanando el camino para que sea juzgado por supuestas violaciones del código de conducta.
El Tribunal de Apelaciones rechazó la apelación y permitió que sea juzgado por supuestamente no informar sobre sus ingresos. El cese de Onnoghen ha desatado las sospechas a nivel nacional e internacional. El 27 de enero tomó posesión el juez Tanko Mohammed en sustitución de Onnoghen.
"Los estándares de Derechos Humanos recogen que los jueces sólo pueden ser cesados si hay pruebas firmes sobre mala conducta o incompetencia", ha dicho el relator sobre independencia de jueces y abogados, Diego García-Sayán.
"Cualquier decisión de suspender o cesar a un juez debe ser justa y adoptada por una autoridad independencia, tal como un consejo judicial o un tribunal", ha señalado, antes de recalcar que es "incompatible" que el cese tenga lugar sin que se sigan los procedimientos legales efectivos.
Así, García-Sayán ha señalado que "todas las instituciones estatales deben cumplir las decisiones de los tribunales nacionales" y ha recordado que cuatro cortes que están por encima en jerarquía al TCC han fallado contra el cese.
El relator ha expresado además su "grave preocupación" por las denuncias sobre amenazas, presiones e interferencias por parte de jueces y abogados del caso. La semana pasada fue detenido uno de los abogados de Onnoghen.
El cese de Onnoghen ha desatado la polémica en el país dado que Buhari, argumentan sus críticos, no tiene la capacidad de cesar unilateralmente al jefe de la Judicatura como ha sucedido en esta ocasión.
Las elecciones, que determinarán quién dirigirá al mayor productor de crudo en África y al país más poblado del continente, están previstas para el próximo 16 de febrero. Buhari figura entre los favoritos, junto al opositor y exvicepresidente Atiku Abubakar.