MADRID, 12 Abr. (EUROPA PRESS) -
Naciones Unidas ha vuelto ha hacer este miércoles un llamamiento al Gobierno de Nigeria para que tome todas las medidas necesarias para rescatar a las 195 niñas que continúan desaparecidas en el país después de que fueran secuestradas en 2014 en su escuela de la localidad de Chibok, en el noreste de Nigeria, por Boko Haram.
"Es extremadamente chocante que tres años después de que tuviera lugar este deplorable y devastador acto de violencia, la mayor parte de la niñas continúen desaparecidas", ha declarado un equipo de relatores especiales de Naciones Unidas en un comunicado.
Al menos 276 personas fueron secuestradas a punta de pistola el 14 de abril de 2014 por milicianos de Boko Haram. El pasado mes de octubre, la organización terrorista liberó a 21 de la niñas. En aquel momento, Naciones Unidas aplaudió la liberación y la consideró como "un gran paso adelante y una oportunidad para ellas de poder comenzar su largo viaje hacia la recuperación y la rehabilitación".
"A medida que pasa el tiempo, aumenta el riesgo de que se olvide el destino del resto de las niñas. No podemos permitir que esto suceda. El Gobierno de Nigeria tiene que hacer más, con el apoyo de la comunidad internacional, para localizarlas y rescatarlas", han apuntado en el comunicado los expertos de la ONU.
"Su continuo cautiverio es una gran fuente de dolor para sus familias y comunidades. Es simplemente inaceptable", han añadido. "Tenemos que recordar que las niñas de Chibok no son las únicas que han sufrido la violencia de Boko Haram. Se estima que cientos de mujeres y niños han podido ser capturados desde 2012", han apuntado.
PASAR POR ALTO LA CRISIS
Durante más de dos años no hubo rastro alguno de las 200 niñas, cuyo rapto provocó críticas a nivel internacional y motivó la puesta en marcha una campaña mediática global en la que participaron decenas de famosos, entre ellas la ex primera dama de Estados Unidos Michelle Obama.
El pasado mes de mayo, una de las menores logró escapar, junto a su hijo fruto de la relación de un miliciano, del campamento en el que estaban recluidas, mientras que Boko Haram aseguró en un vídeo publicado en agosto que varias de ellas habían muerto en bombardeos aéreos del Ejército.
No fue hasta octubre del año pasado cuando los milicianos de Boko Haram decidieron acceder a liberar a 21 niñas más. La aparición de las menores supuso una gran victoria para el presidente nigeriano, Muhammadu Buhari.
Buhari ha dicho en repetidas ocasiones que tanto él como su Gobierno están comprometidos a asegurar que las niñas de Chibok vuelvan a sus casas. Según ha asegurado, los líderes de Boko Haram se han mostrado dispuestos a continuar negociando sobre este tema.
No obstante, las autoridades temen que, al centrar la atención en la liberación de las niñas, se pase por alto la grave situación humanitaria en la que se encuentran numerosos nigerianos en el norte del país a causa de la insurgencia, que ha provocado el desplazamiento de dos millones de personas y ha causado más de 15.000 muertes.