MADRID 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
El coordinador humanitario de la ONU en Nigeria, Edward Kallon, ha condenado nuevamente la masacre de decenas de agricultores perpetrada el sábado por Boko Haram en el noreste de Nigeria, al tiempo que ha insistido en que solo por la vía militar no se conseguirá devolver la paz a esta región, inmersa desde hace más de una década en una violenta insurgencia.
Kallon visitó este martes Zabarmari, la localidad del estado de Borno en la que se produjo la matanza, cuyo balance total de fallecidos aún no está claro. El propio coordinador humanitario llegó a hablar de 110 muertos, para luego rectificar por "decenas" mientras que las autoridades han informado de 43 fallecidos pero, según Kallon, "se han recuperado más cuerpos".
"Este fue un acto de completa inhumanidad y crueldad abyecta", ha sostenido en un comunicado, defendiendo que "los autores de este acto odioso y sinsentido deben ser llevados ante la justicia". Según el coordinador humanitario, además de los fallecidos hay también desaparecidos, incluidas mujeres, que se cree que habrían sido secuestradas.
Kallon, que durante su visita se reunió con el gobernador de Borno, Babagana Umara Zulum, así como los de otros estados de la región, ha subrayado que todos coinciden en que "estabilizar y desarrollar el noreste no solo es importante para quienes viven en estos estados sino que también es crucial para todo el país y clave para la región" del lago Chad.
"La situación en el noreste es la de una crisis compleja, con una emergencia humanitaria y, en los últimos meses, los desafíos sin precedentes debido a la pandemia de COVID-19 y sus consecuencias en la economía y el tejido social", ha resaltado el responsable de la ONU indiciendo en que en los tres estados más afectados hay 4,3 millones de personas en inseguridad alimentaria que podrían llegar a 5,1 millones el próximo verano.
Según el coordinador humanitario, las acciones que hay que adoptar "van más allá de la respuesta de seguridad". Nigeria, ha subrayado, "no es el único país en el Sahel víctima de grupos armados violentos" y en la región ha quedado claro que "una respuesta de seguridad por sí sola no será suficiente para llevar la paz y la seguridad a un estado como Borno, que se enfrenta a la violencia desde hace más de una década".
"Todos los actores, incluida la comunidad internacional, tienen que unir fuerzas y aumentar el apoyo a los habitantes de Borno, Adamawa y Yobe", los tres estados más afectados por las acciones de Boko Haram y de su escisión, Estado Islámico en África Occidental (ISWA), ha subrayado.
En su opinión, "solo trabajando juntos, salvando vidas, reconstruyendo comunidades, ofreciendo nuevas oportunidades, aumenando los esfuerzos de paz, desarrollando la infraestructura, fomentando la educación, seremos capaces de abordar las causas en la raíz de la crisis, reducir la inseguridad y detener la violencia".