MADRID, 8 Oct. (EUROPA PRESS) -
La ONU ha anunciado un plan de emergencia para atender a los 136.000 refugiados desplazados desde Nagorno Karabaj a Armenia tras la ofensiva militar relámpago de Azerbaiyán que les ha permitido recuperar este territorio hasta entonces de mayoría armenia. Para ello se necesita una financiación de 97 millones de dólares (unos 91,6 millones de euros).
"Pedimos a la comunidad internacional ayuda urgente para los refugiados y quienes los acogen. El apoyo internacional es crucial para sostener esta acogida y permitirnos responder a las necesidades inmediatas", ha explicado el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Filippo Grandi.
La invasión militar azerí del 24 de septiembre provocó que en apenas una semana más de 100.000 refugiados huyeran de Nagorno Karabaj a Armenia ante el temor a una limpieza étnica.
Por ello ACNUR, otras agencias de la ONU y las ONG asociadas han pedido financiación de emergencia en forma de ayuda humanitaria y protección para los refugiados y quienes los están alojando.
"Las comunidades han abierto generosamente sus puertas y han mostrado una tremenda solidaridad con los refugiados. La respuesta local, liderada por las autoridades nacionales, voluntarios y sociedad civil, ha sido igualmente destacable", ha apuntado Grandi.
En el plan de respuesta para los refugiados del Gobierno armenio se incluye a 60 organizaciones, incluidas 43 ONG armenias, y prevé la ayuda necesaria para un periodo de seis meses, hasta marzo de 2024. Abarca a 231.000 personas que incluyen a 136.000 refugiados y a 95.000 miembros de las comunidades de acogida teniendo en cuenta el duro invierno que se avecina.
Entre los refugiados hay unos 30.000 menores de edad y multitud de personas vulnerables como embarazadas, personas con discapacidad o personas con enfermedades crónicas. Más de la mitad de los refugiados son personas mayores o menores de edad.
"La mayoría huyeron con lo que podían transportar y llegaron angustiados, agotados y preocupados por su futuro", resalta la ONU en un comunicado.
Los nuevos refugiados suponen más del 3,4 por ciento de la población de Armenia y se suman a los 35.000 refugiados y solicitantes de asilo que ya tenía el país.