ÁMSTERDAM, 6 Mar. (Reuters/EP) -
El Mecanismo para los Tribunales Penales Internacionales de la ONU ha acusado a Turquía de poner en cuestión su independencia judicial al no liberar al magistrado Aydin Sefa Akay, detenido en 2016 por su supuesta vinculación a la trama golpista, y han remitido la polémica al Consejo de Seguridad.
Akay fue detenido en septiembre de 2016 por su presunta relación con la intentona golpista de julio y, desde entonces, ha permanecido bajo custodia. La ONU ha recalcado que, como juez internacional, dispone de "privilegios e inmunidades", independientemente de que se encuentre en su país natal o en uno ajeno.
Ante la falta de avances y las reiteradas negativas de Ankara, el Mecanismo, heredero de las cortes establecidas para estudiar los crímenes de Ruanda y la antigua Yugoslavia, ha optado por remitir el caso ante el Consejo de Seguridad de la ONU.
El juez forma parte de la cámara de apelaciones que revisa el caso del exdirigente ruandés Augustin Ngirabatware, condenado a 30 años de cárcel por genocidio. Para que Akay pudiese cumplir con sus obligaciones, el Mecanismo había solicitado que su liberación tuviese lugar antes del pasado 14 de febrero.