MADRID 30 Sep. (EUROPA PRESS) -
La ONU ha designado a su primer enviado especial para los refugiados de Somalia, en un momento clave marcado por los deseos del Gobierno de Kenia de cerrar el campamento de Dadaab, donde aún viven alrededor de 300.000 somalíes.
El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados ha confirmado en un comunicado el nombramiento de Mohamed Abdi Affey, antiguo embajador keniano en Somalia. Bajo su vigilancia quedarán más de un millón de somalíes que viven fuera de su país, principalmente en Kenia, Etiopía, Uganda, Yibuti y Yemen.
"Debido a los recientes logros políticos y de seguridad en algunas partes de Somalia, junto a las mayores presiones en los países de acogida y a la fatiga en materia de asilo, es importante renovar los esfuerzos y encontrar soluciones duraderas para los refugiados", ha subrayado ACNUR en un comunicado.
Affey, que cuenta con un mandato inicial de seis meses, deberá "buscar soluciones" para la situación de los refugiados y solicitantes de asilo, así como fomentar el diálogo con los distintos actores de la región para garantizar que se respetan los derechos de las personas necesitadas en todo momento.
Entre sus cometidos figura, además, garantizar que quienes quieran regresar a Somalia puedan acceder a una "reintegración" eficaz. La ONU ha puesto en marcha programas de retorno voluntario, pero sólo en Dadaab quedan más de 300.000 refugiados, muchos de ellos hijos o incluso nietos de quienes emigraron huyendo de la violencia o la pobreza.