En el país hay 3,3 millones de personas gravemente malnutridas, 2,1 millones de ellas niños
MADRID, 8 Feb. (EUROPA PRESS) -
Naciones Unidas y sus socios humanitarios han hecho este miércoles un llamamiento por 2.100 millones de dólares para poder ofrecer asistencia a 12 millones de personas en Yemen, donde el riesgo de hambruna es una realidad.
"Dos años de guerra han devastado Yemen y millones de niños, mujeres y hombres necesitan desesperadamente nuestra ayuda. Sin apoyo internacional, podrían enfrentarse a la amenaza de la hambruna durante 2017", ha advertido el subsecretario general de Asuntos Humanitarios de la ONU, Stephen O'Brien, en el lanzamiento del mayor llamamiento de fondos hasta la fecha para Yemen.
"Insto a los donantes a mantener e incrementar su apoyo a nuestra respuesta colectiva" en este país, ha añadido, recalcando que "los socios humanitarios están listos para responder, pero necesitan acceso a tiempo y sin impedimentos y recursos adecuados para atender las necesidades humanitarias donde quiera que surgen".
Según las estimaciones de la ONU, unos 18,8 millones de personas, es decir, dos tercio de la población de Yemen, necesitan ayuda humanitaria. Unos 10,3 millones están en una situación más grave y necesitan con urgencia algún tipo de asistencia como comida, atención sanitaria, agua potable y saneamiento y protección. Además, 3,3 millones de personas, entre ellas 2,1 millones de niños, se encuentran gravemente malnutridos.
El conflicto, que se recrudeció en marzo de 2016 con la intervención de una coalición liderada por Arabia Saudí en apoyo del Gobierno de Abdo Rabbu Mansur Hadi frente a los rebeldes huthis y las fuerzas leales al expresidente Alí Abdulá Salé, ha provocado también 2 millones de desplazados internos.
"Pido a los donantes que ayuden a Yemen en su momento de gran necesidad", ha reclamado el coordinador humanitario de la ONU en Yemen, Jamie McGoldrick, en el comunicado del llamamiento de fondos.
"SI NO TE MATAN LAS BOMBAS TE MATA EL HAMBRE"
"En Yemen, si no te matan las bombas, una lenta y dolorosa muerte por inanición es ahora una creciente amenaza", ha denunciado el secretario general del Consejo Noruego para Refugiados (NRW), Jan Egeland, en otro comunicado.
"La espiral descendente de Yemen significa que veremos más imágenes impactantes de desesperación, con la hambruna posiblemente propagándose por el país, a menos que se ponga fin al conflicto y que la profunda crisis económica y la falta de ayuda se reviertan", ha añadido.
"Desde que comenzó el conflicto, todas las partes enfrentadas han impedido nuestra capacidad de llegar a la gente más necesitada de ayuda humanitaria", ha denunciado Egeland, defendiendo que "es crucial que todas las restricciones a la ayuda se levanten para que seamos capaces de ofrecer servicios que salven vidas en todo Yemen".