MADRID, 4 Mar. (EUROPA PRESS) -
La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, ha denunciado este jueves que se siguen produciendo "graves" abusos en la región etíope de Tigray, algunos de los cuales podrían ser constitutivos de crímenes de guerra y contra la humanidad, por lo que ha pedido permiso para poder realizar una investigación "objetiva" e "independiente".
Los "análisis preliminares" ponen en cuestión las acciones adoptadas tanto por las Fuerzas Armadas de Etiopía como por el Frente para la Liberación Popular de Tigray (TPLF), contra el que el Gobierno de Abiy Ahmed lanzó a principios de noviembre una ofensiva militar a raíz de un ataque.
También se sospecha de posibles abusos cometidos por las tropas de la región de Ahmara y las Fuerzas Armadas de Eritrea, acusadas esta semana por Amnistía Internacional de masacrar a más de 200 civiles en Tigray, una región prácticamente cerrada al escrutinio externo durante estos últimos meses.
"Con múltiples actores en el conflicto, negaciones generalizadas y cruce de acusaciones, hay una clara necesidad de una evaluación objetiva e independiente de las informaciones", en la medida en que "las víctimas y los supervivientes de los abusos no pueden ver negados sus derechos a la verdad y la justicia", ha señalado Bachelet.
La expresidenta chilena ha reclamado a Abiy que permite tanto a la oficina d Derechos Humanos como a otros observadores independientes entrar en Tigray e investigar por su cuenta, ya que desde la zona siguen llegando denuncias "continuas" y "creíbles" sobre todo tipo de barbaridades.
Entre los abusos registrados --y atribuidos a "todas las partes"-- figuran "violencia sexual y por razones de género, ejecuciones extrajudiciales, destrucción indiscriminada y saqueo de propiedades públicas y privadas". Todo ello en un contexto en el que sigue habiendo enfrentamientos armados en el centro de Tigray.
Fuentes "fiables" han denunciado la muerte de ocho manifestantes a manos de las fuerzas etíopes entre el 9 y el 10 de febrero y fueron más de 130 los casos de abusos sexuales registrados entre diciembre y enero, si bien la ONU asume que este dato está por debajo del real dado que la gran mayoría de casos quedarían silenciados.
Sin una investigación, "temo que las violaciones seguirán produciéndose con impunidad y que la situación será volátil durante un largo tiempo", ha dicho la Alta Comisionada, quien ha reclamado también respeto para la actividad de los periodistas desplegados en la zona. "Las víctimas y testigos de violaciones de los Derechos Humanos deben poder compartir su testimonio sin miedo a represalia", ha añadido.
Las palabras de Bachelet se suman a otras de gobiernos internacionales como el de Estados Unidos, que esta semana habló abiertamente de "atrocidades" en un tono que generó críticas por parte del Gobierno de Etiopía. El Ejecutivo de Abiy defiende la necesidad de seguir combatiendo al TPLF y ha prometido acceso de la ayuda humanitaria.