Zeid advierte de que restaurar la pena de muerte sería "un gran paso en la dirección equivocada"
MADRID, 19 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Raad al Hussein, ha pedido este martes a las autoridades turcas que respondan conforme al Estado de Derecho y reforzando la protección de los Derechos Humanos tras el intento de golpe de Estado fallido del viernes pasado.
En un comunicado, Zeid ha instado al Gobierno de Turquía a que "responda manteniendo el Estado de Derecho, fortaleciendo la protección de los Derechos Humanos y reforzando las instituciones democráticas".
El responsable de la ONU, que ha lamentado las muertes ocasionadas por los golpistas y elogiado la "valentía" de los turcos que "defendieron su país contra los que buscaban minar su democracia", ha sostenido que "los responsables de esa violencia deben ser llevados ante la justicia con pleno respeto de los estándares para un juicio justo".
Zeid ha considerado especialmente "crucial garantizar que no se vulneren los Derechos Humanos en nombre de la seguridad y con las prisas por castigar a quienes se percibe que son responsables".
En particular, ha expresado su preocupación por el elevado número de jueces y fiscales que han sido suspendidos y detenidos tras la intentona, incidiendo en las graves preocupaciones que hay sobre la independencia judicial en Turquía.
"La independencia de la judicatura y de la profesión legal es clave para la administración justa de justicia y los jueces deben ser capaces de ejercer sus funciones sin restricciones indebidas, presiones, amenazas o interferencias", ha sostenido, aclarando que los arrestos le hacen temer que haya "detención arbitraria".
Por otra parte, ante el elevado número de detenidos hasta el momento (más de 6.000 según las autoridades), el responsable de la ONU ha subrayado la importancia de respetar la presunción de inocencia, el debido proceso y las garantías de juicio justo y de permitir que observadores independientes accedan a los centros de detención.
PENA DE MUERTE
Por último, ha expresado su pesar por la sugerencia de que la pena de muerte podría ser restaurada en el país. "Turquía abolió la pena de muerte en 2004, pero de hecho no ha aplicado la pena capital desde hace 32 años, en 1984", ha resaltado.
En este sentido, ha recordado que recuperarla "violaría las obligaciones de Turquía en virtud del Derecho Internacional" y supondría "un gran paso en la dirección equivocada". "Urjo al Gobierno turco a que se contenga de dar marcha atrás al reloj en materia de protección de los Derechos Humanos", ha remachado.