MADRID, 19 Nov. (EUROPA PRESS) -
El enviado especial de Naciones Unidas para el ébola, David Nabarro, ha reclamado este miércoles a todos los países involucrados en la respuesta al virus que "se mantengan vigilantes" debido a que, pese a los avances logrados, este no ha sido erradicado.
"Siento un gran orgullo por el liderazgo exhibido en los tres países afectados --Liberia, Guinea y Sierra Leona-- y por la participación de sus comunidades en la lucha contra la enfermedad. Esto ha sido fundamental en los avances alcanzados en el control del brote, con el apoyo internacional", ha dicho.
Así, ha destacado que, durante un periodo de 90 días, la transmisión del virus ha terminado en Sierra Leona y Liberia, mientras que en Guinea persisten riesgos, si bien la tendencia es positiva. Si en 42 días no se presenta ningún nuevo caso, Guinea sería declarado libre de ébola de forma oficial.
Nabarro ha subrayado que los 50.000 supervivientes al virus y sus familiares hacen frente a retos, por lo que ha manifestado que una de sus prioridades será que estas personas "tengan acceso a los cuidados que les permitan mantener la higiene, y si son hombres, a que practiquen sexo seguro".
En este sentido, ha recordado que el virus desaparece del torrente sanguíneo pero que puede persistir durante más tiempo en otros fluidos y partes del cuerpo, incluyendo el interior de los ojos, el sistema nervioso central, la próstata, el semen, el líquido amniótico, la placenta y la leche materna.
El brote de ébola ha causado hasta la fecha la muerte de 11.299 personas: 4.806 en Liberia, 3.955 en Sierra Leona y 2.536 en Guinea, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS). En total, en los tres países se han detectado 28.598 casos desde el inicio del brote.