GINEBRA, 25 Ago. (Reuters/EP) -
Naciones Unidas ha reiterado este viernes su "profunda preocupación" por el deterioro de la situación de seguridad en Rajine, debido a los crecientes ataques en torno a la comunidad rohingya, que habita mayoritariamente en este estado birmano.
"Estamos profundamente preocupados por la situación de seguridad en el estado de Rajine", ha dicho la coordinadora residente de Naciones Unidas en Birmania, Renata Lok-Dessallien, en un comunicado.
Lok-Dessallien ha condenado en concreto el ataque cometido este viernes por insurgentes rohingya contra puestos policiales y una base militar de Rajine, que ha dejado 32 muertos: 21 rebeldes y once agentes.
"Urgimos a todas las partes a abstenerse de llevar a cabo cualquier tipo de violencia, a proteger a la población civil y a restaurar el orden público", ha indicado.
Los rohingya son una minoría étnica de fe musulmana que se concentra en Rajine. Son más de un millón de personas, pero el Gobierno birmano no les reconoce como ciudadanos porque considera que son descendientes de inmigrantes ilegales procedentes de Bangladesh.
El mayor estallido de violencia se produjo hace cinco años, cuando los enfrentamientos entre rohingya y budistas --que son mayoría en el resto de Birmania-- se saldaron con un balance de más 200 muertos y 140.000 desplazados en la capital de Rajine
El conflicto se reavivó el pasado mes de octubre por un ataque lanzado por una milicia rohingya contra la guardia fronteriza en el que murieron nueve agentes. Más de 87.000 han huido a Bangladesh en los últimos meses por miedo a represalias.