CARACAS, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
La oposición venezolana ha exigido la dimisión de la ministra de Asuntos Penitenciarios, Iris Varela, por la crisis desatada en la cárcel de San Antonio a raíz de la muerte del líder de una de las bandas que controlan la prisión.
"Yo creo que este es un caso más que evidente para que la Asamblea Nacional (AN) apruebe un voto de censura y empiece a destituir ministros y hacer cumplir la Constitución", ha dicho el líder opositor Henrique Capriles.
"Cada vez que a esta señora le preguntan, dice que eso es un problema normal, que la cárcel está pacificada, cuando esto es responsabilidad del Ministerio de Asuntos Penitenciarios", ha criticado, según informa el diario venezolano 'El Nacional'.
La polémica surgió el domingo cuando el propio Capriles difundió un vídeo en el que se puede ver a varios reclusos de la cárcel de San Antonio, ubicada en isla Margarita, lanzar disparos al aire en el funeral de su líder, Teófilo Cazorla, alias 'El Conejo'.
La grabación muestra a los presos con armas de fuego de todo tipo, lo que ha suscitado un enérgico debate sobre quién controla realmente las cárceles venezolanas, ya que la situación en San Antonio no sería excepcional.
La polémica ha aumentado por las declaraciones que Varela hizo hace pocos meses ante el Parlamento, antes de que la Mesa de Unidad Democrática --coalición opositora-- ganara las elecciones legislativas. "No hay armas en las cárceles de Venezuela", aseguró.
La viceministra de Asuntos Penitenciarios, Mariely Valdez, ha ratificado las palabras de Varela y, en cualquier caso, ha defendido que "las cárceles ya estaban así", al tiempo que ha pedido no difundir nuevos vídeos. "No es bueno que adelantemos información al país", ha sostenido.
Desde distintas ONG han denunciado que las cárceles venezolanas están dominadas por los 'pranes', auténticas mafias que suelen enfrentarse por el control de la prisión dando lugar a batallas campales en los centros de reclusión.
'El Conejo' era el líder del 'pran' dominante en San Antonio y fue asesinado por supuestos miembros de grupos rivales a la salida de una fiesta celebrada en isla Margarita mientras disfrutaba de la libertad condicional.