MADRID, 22 Nov. (EUROPA PRESS) -
El partido opositor israelí Azul y Blanco, liderado por Benny Gantz, ha instado al primer ministro, Benjamin Netanyahu, a renunciar a los cargos ministeriales que ha acaparado en los últimos años tras la confirmación de su imputación por presuntos delitos de corrupción.
Un jefe de Gobierno no está obligado por ley a dimitir si hay una condena en firme de la máxima instancia judicial, pero para los ministros la normativa es más estricta. Por este motivo, Azul y Blanco quiere que Netanyahu abandone sus cargos en los ministerios de Sanidad, Asuntos de la Diáspora, Agricultura y Trabajo y Servicios Sociales.
"Conforme a la jurisprudencia del Tribunal Supremo, un ministro que ha sido imputado no puede seguir en el cargo", ha alegado la formación opositora en sendas cartas remitidas a Netanyahu y al fiscal general de Israel, Avichai Mandelblit, que formalizó el jueves las imputaciones por sobornos, fraude y abuso de confianza, según el periódico 'The Jerusalem Post'.
El primer ministro, que ha descrito las imputaciones como un "intento de golpe", ha recibido el apoyo de dirigentes del centro-derecha, especialmente de sus socios políticos. El ministro de Exteriores, Israel Katz, ha apelado a la "presunción de inocencia" y ha señalado que Netanyahu es "un patriota que se ha sacrificado y actuado toda su vida en aras de la seguridad del Estado de Israel y del refuerzo de su posición en el mundo".
Por ahora, Netanyahu no ha dado muestras de apartarse del poder, con el país a las puertas ya de unas terceras elecciones parlamentarias. Los diputados tienen tres semanas para encontrar algún candidato a primer ministro que suscite un apoyo mayoritario en la Knesset tras los fracasos de los intentos tanto de Netanyahu como de Gantz para formar gobierno.