GINEBRA, 2 Mar. (Reuters/EP) -
La delegación de la oposición siria en las conversaciones de paz con el Gobierno de Bashar al Assad ha advertido este jueves de que la posibilidad de llegar a un acuerdo es "muy débil", dos semanas después del inicio de las negociaciones en Ginebra auspiciadas por la ONU.
Basma Kodmani, uno de los miembros del Alto Comité para las Negociaciones, ha reiterado el convencimiento de la oposición siria de que "no hay solución militar" a la guerra. "Buscamos una solución política", ha ratificado.
"Pero al término de esta segunda semana o de estos diez días de conversaciones no hay perspectivas (de lograrlo). Las posibilidades son muy débiles", ha afirmado en declaraciones a los medios de comunicación desde la ciudad suiza.
Por su parte, el jefe negociador del Gobierno sirio, Bashar al Jaafari, ha acusado al Alto Comité de secuestrar las conversaciones de paz por su negativa a formar una única delegación con los demás grupos opositores e incluir el terrorismo en la agenda del diálogo.
"Hemos oído que la plataforma de Riad rechaza la inclusión del (tema del) terrorismo (...) No nos sorprende, porque algunos miembros son también miembros de organizaciones terroristas", ha dicho Jaafari tras una reunión con el enviado especial de la ONU, Staffan de Mistura.
El representante sirio ha reiterado que el régimen de Damasco seguirá adelante con las operaciones antiterrorista "hasta que haya recuperado hasta el último centímetro del territorio de los terroristas extranjeros que están provocando el caos".
El diálogo de paz se retomó el pasado febrero en Ginebra bajo los auspicios de De Mistura, un año después de que descarrilara por la escalada militar en torno a la importante ciudad de Alepo, que finalmente cayó en manos del Gobierno.
Esta vez, el proceso de Ginebra cuenta con el impulso de la ronda de Astaná, una serie de contactos indirectos entre las partes mediados por Rusia, Turquía e Irán para velar por el alto el fuego que rige desde el 30 de diciembre en Siria.