Los aliados discuten este miércoles con Rusia como reducir el riesgo de accidentes militares
BRUSELAS, 19 Abr. (EUROPA PRESS) -
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha asegurado que "la OTAN no busca una nueva Guerra Fría" con Rusia pero ha avisado de la necesidad de que ambas partes trabajen para reducir el riesgo de "incidentes peligrosos" como los que se produjeron la semana pasada en el Báltico cuando dos cazas rusos se aproximaron en el marco de maniobras que hacían cerca de un destructor y un helicóptero estadounidenses en la zona.
Los países de OTAN y Rusia mantendrán este miércoles 20 de abril una reunión del Consejo OTAN-Rusia a nivel de embajadores, la primera desde 2014, para discutir, entre otros, cómo reducir el riesgo de incidentes y aumentar la transparencia en las acciones militares de cada parte, aunque también abordarán la situación en Ucrania y la aplicación de los acuerdos de Minsk.
Stoltenberg ya criticó el pasado 14 de abril en Londres las maniobras de aproximación dos aviones rusos cerca de un destructor estadounidense en el Báltico, insistiendo en que es un comportamiento "no seguro y no es profesional" e insistió en la importancia de hacer "más esfuerzos" para reducir el riesgo de "incidentes y accidentes" y evitar que se salgan de control.
Dos cazas rusos Sujoi SU-24 volaron cerca del buque destructor de Estados Unidos 'USS Donald Cook' el martes, 12 de abril, en aguas internacionales y frente a las costas de Rusia, durante un "ataque simulado" y después se aproximaron a un helicóptero estadounidense, según una fuente oficial estadounidense que ha descrito el incidente como una de las acciones más agresivas de Rusia de la historia reciente.
"Incidentes como hemos visto en el mar Báltico la última semana no son profesionales ni seguros", ha insistido en declaraciones a la prensa el secretario general noruego antes de participar en una reunión con los ministros de Defensa de la UE en Luxemburgo, precisamente para hablar del refuerzo de la cooperación entre la UE y la OTAN para hacer frente a amenazas híbridas, que ha recordado combinan acciones militares, incluido operaciones encubiertas y medios no militares.
Stoltenberg ha insistido en que estos "incidentes peligrosos" subrayan la importancia de mantener las líneas de comunicación militar "abiertas" con Rusia, "ser transparentes" en las acciones militares respectivas, "contribuir a la predictibilidad" y analizar "más mecanismos para reducir el riesgo relacionado con las actividades militares".
"Discutiremos las actividades militares y espero que los rusos digan y presenten su punto de vista (...) nosotros presentaremos nuestro punto de vista", ha dicho, admitiendo que "el principal objetivo" de la reunión es intercambiar puntos de vista sobre "las actividades militares".
"La OTAN no busca una nueva Guerra Fría. Y no quiere una nueva carrera armamentística" con Rusia, ha dejado claro Stoltenberg, que ha justificado el mayor refuerzo de la defensa colectiva acometido por la OTAN desde el fin de la Guerra Fría en "respuesta directa" a "un comportamiento agresivo ruso en Ucrania" pero es "defensivo" y "proporcional".
Stoltenberg ha subrayado la importancia de mantener "un diálogo político" con Rusia, "especialmente cuando los momentos son difíciles como ahora, cuando las tensiones son elevadas".
Pero ha dejado claro que ello no implica "volver a la normalidad" con Rusia. La OTAN, ha recordado, suspendió en 2014 su cooperación práctica y militar con Rusia en respuesta a su intervención en Ucrania pero dejó abierta la puerta al diálogo.