La OTAN pide a EEUU y Turquía que "coordinen" sus acciones militares en el norte de Siria

BRUSELAS, 4 May. (EUROPA PRESS) -

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha dejado claro este jueves que espera que Estados Unidos y Turquía "coordinen" sus respectivas acciones militares en el norte de Siria dada la situación "muy compleja y muy difícil" sobre el terreno.

"Espero que todos los aliados de la OTAN coordinen sus actividades, especialmente en el norte de Siria, donde hay una situación muy completa y muy difícil", ha dicho en rueda de prensa Stoltenberg, al ser preguntado por si las divergencias entre Estados Unidos y Turquía en Siria son un problema para la Alianza.

El jefe de las fuerzas estadounidenses en Europa, el general Curtis Scaparrotti, ha trasladado al jefe del Estado Mayor del Ejército turco, el general Hulusi Akar, la preocupación de Estados Unidos por los bombardeos de la aviación turca en Siria e Irak contra las fuerzas kurdas, que son los principales aliados de Estados Unidos sobre el terreno y es algo que molesta enormemente a Ankara.

Fuentes estadounidenses informaron la semana pasada que Turquía había comunicado uno de estos bombardeos con solo una hora de antelación, un tiempo insuficiente para garantizar la seguridad de las fuerzas de la coalición contra el Estado Islámico presentes en el terreno.

Stoltenberg ha dejado claro que "la OTAN no está presente en Siria" y por tanto ha rechazado "comentar" sobre las detalles operativos de sus respectivas actividades en Siria, pero ha insistido en que deben coordinar sus acciones militares.

Stoltenberg ha recordado que la OTAN ya está prestando apoyo a la coalición internacional que encabeza Estados Unidos contra el Estado Islámico con un avión de alerta temprana AWACS para mejorar la imagen aérea de la coalición y está contribuyendo a entrenar a las fuerzas iraquíes.

Los jefes de Estado y de Gobierno de la Alianza Atlántica discutirán en la cumbre del 25 de mayo en Bruselas "qué más puede hacer la OTAN" para combatir el terrorismo y apoyar a la coalición internacional contra el Estado Islámico, aunque Stoltenberg ha insistido en que "lo más importante" que la Alianza puede hacer "es consolidar las capacidades locales para permitir a las fuerzas locales combatir el terrorismo por sí mismas" y estabilizar sus países. Stoltenberg ya rechazó ayer ante la Subcomisión de Defensa de la Eurocámara que la OTAN fuera a participar en operaciones de combate como tal.

Stoltenberg no ha querido anticipar las "misiones" concretas que se espera que aprueben en la cumbre, aunque ha recordado que los aliados deben decidir todavía el futuro de su misión de entrenamiento, asistencia y apoyo a las fuerzas afganas, incluido "el nivel de fuerzas" que se esperan que mantengan más allá de este año.

En el pasado, también ha defendido que hay margen para que la OTAN amplíe la formación de las fuerzas iraquíes. La OTAN también estudia en detalle cómo contribuir a ayudar a Libia a consolidar instituciones de seguridad, como un Ministerio de Defensa, un Estado Mayor Conjunto y servicios de inteligencia.

SIN DECISIÓN TODAVÍA SOBRE PLANES NACIONALES PARA ELEVAR GASTO

El otro gran asunto que se abordará en la cumbre de mayo de la OTAN será el gasto en defensa y la necesidad de equilibrar el reparto de la carga entre los aliados, aunque Stoltenberg ha admitido que los aliados todavía no han decidido sobre la petición de Estados Unidos de que desarrollen planes nacionales para ir detallando cómo piensan cumplir la meta pactada en 2014 de destinar el 2% del PIB a defensa en una década.

"No se ha tomado ninguna decisión", ha admitido, al ser preguntado si ya se ha acordado desarrollar los planes nacionales, aunque ha confiado en que habrá "decisiones" en la cumbre. Estados Unidos presiona a los aliados para presentar planes nacionales detallados para finales de año para explicar cómo van a llegar al 2% pactado.

Stoltenberg ha explicado que se discute la idea de "algunos aliados" de contar con "un documento donde los aliados puedan informar de cómo están cumpliendo la promesa", dejando claro que se trata de dar cuenta no solo del gasto en defensa, sino también de los progresos en capacidades y las contribuciones a las operaciones y misiones de la OTAN.