BRUSELAS, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los países de la OTAN se sentarán este miércoles frente a Rusia para abordar la escalada de las tensiones en la frontera con Ucrania, donde la gran concentración militar de Moscú ha hecho saltar las alarmas sobre una posible agresión contra Kiev.
Según han confirmado fuentes diplomáticas, la cita reunirá a los 30 aliados con las autoridades rusas, en una reunión presidida por el secretario general, Jens Stoltenberg, en la que Estados Unidos estará representado por su vicesecretaria de Estado, Wendy Sherman, y Rusia por su viceministro de Exteriores, Alexander Grushko.
El Consejo OTAN-Rusia de este miércoles se presenta como el primer paso para rebajar las tensiones entre los aliados y el Kremlin, después de un año repleto de desencuentros políticos y diplomáticos y con la amenaza sobre Ucrania como punto de fricción, después de que Moscú desplegara unidades militares y decenas de miles de efectivos en la frontera.
La cita sigue a los contactos mantenidos en Ginebra entre Washington y Moscú durante la jornada del lunes y que concluyeron sin que las partes se movieran de sus planteamientos iniciales y con el único acuerdo de seguir dialogando.
Estados Unidos ha tomado la delantera en estos contactos, en los que quiere involucrar a la OTAN pese a las posibles implicaciones en la seguridad europea y a que la UE ha reivindicado su papel en la resolución de la crisis.
Frente a las "garantías de seguridad" que pide Moscú, que reclama una menor presencia de la OTAN y la UE en su vecindario, el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, ha recalcado que "cualquier discusión sobre la seguridad europea debe tener lugar en coordinación y con la participación de la UE".
Washington ha apuntado que no se tomarán "decisiones sobre Ucrania sin Ucrania; sobre Europa sin Europa o sobre la OTAN sin la OTAN". Además considera una línea roja hablar de vetar la entrada de Kiev en la organización militar, como reclama el Kremlin. Eso si, la representante norteamericana se abrió en la reunión de Suiza a "establecer límites recíprocos en el tamaño y alcance de las maniobras militares y a mejorar la transparencia sobre ejercicios".
Con todo, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha defendido llegar a acuerdos con Rusia y ha destacado la reunión como una oportunidad para allanar el camino a una salida de la crisis en la frontera con Ucrania.
Sin embargo, ha rebajado las expectativas sobre el diálogo con Moscú, y, aunque ve un paso positivo que la OTAN y Rusia se sienten a hablar, Stoltenberg ha dicho que esta cita no resolverá todos los asuntos pendientes.
Por su lado, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha afirmado en las últimas horas que está dispuesto a tomar "las decisiones que sean necesarias" para "terminar el conflicto", para lo cual ha emplazado a celebrar una nueva cumbre de líderes del conocido como cuarteto de Normandía, del que también forman parte Rusia, Francia y Alemania.