El Gobierno habla de "sedición" tras el anuncio opositor para crear un consejo de transición
Konan Bedié denuncia que su residencia y la de otros líderes opositores han sido atacadas
MADRID, 3 (EUROPA PRESS)
El presidente de Costa de Marfil, Alassane Ouattara, ha sido reelegido para un tercer mandato con el 94,27 por ciento de los votos en las elecciones celebradas el pasado sábado, según ha anunciado este martes la comisión electoral.
Los dos principales candidatos de la oposición, que habían llamado al boicot de la cita con las urnas y que ya han dicho que no reconocerán el resultado, apenas han recibido respaldos.
Así, según la comisión electoral, el expresidente Henri Konan Bédié ha recabado el 1,66 por ciento de los votos y el ex primer ministro Pascal Affi N'Guessan, candidato del Frente Popular Marfileño (FPI, el partido del expresidente Laurent Gbagbo), solo ha obtenido el 0,99 por ciento.
El cuarto candidato en liza, Konan Kouadio Bertin, quien había aprovechado el boicot de Bedié y Affi N'Guessan para presentarse como la única alternativa a Ouattara, tan solo ha sumado el 1,99 por ciento, según los datos oficiales, recogidos por los medios locales.
Kouadio Bertin ha sido el único candidato en felicitar a Ouattara tras su victoria y ha defendido nuevamente su candidatura. "Entre una guerra civil y unas elecciones imperfectas, elegí unas elecciones imperfectas", ha sostenido, antes de hacer un llamamiento a un "diálogo nacional" para poner fin a la crisis.
"Juntos, acabamos de dar un paso decisivo. Nada puede justificar el uso de la violencia. El significado de mi candidatura era adelantar propuestas concretas para el país", ha resaltado, tal y como ha recogido el portal de noticias Koaci.
Ouattara, que por el momento no ha realizado declaraciones oficiales, ha publicado una fotografía suya en su cuenta en Twitter junto al mensaje: "¡Gracias! Gracias por la victoria de una Costa de Marfil solidaria".
Por otra parte, a falta de que el Consejo Constitucional valide estos resultados, la comisión electoral ha situado la tasa de participación en el 53,9 por ciento, a pesar de los numerosos incidentes e incluso muertos que se produjeron durante la jornada electoral.
Ya desde el sábado, la oposición ha dejado claro que no aceptará el resultado de las elecciones, que considera ilegales habida cuenta de que la Constitución del país solo permite dos mandatos presidenciales, que Ouattara ya habría agotado. Sin embargo, el presidente se ha amparado en que la Carta Magna ha sido enmendada durante su mandato para poner a cero su contador.
CONSEJO DE TRANSICIÓN OPOSITOR
Así las cosas, la oposición anunció a última hora del lunes la creación de un Consejo Nacional de Transición. En rueda de prensa, Affi N'Guessan, que ejerce como portavoz de los principales grupos opositores, explicó que este organismo estará liderado por Konan Bédié, antes de agregar que tendrá entre sus funciones "preparar unas elecciones presidenciales justas y transparentes" y "poner en marcha en las próximas horas un Gobierno de transición".
Según argumentó, la decisión ha sido adoptada "tras la parodia de elecciones" del 31 de octubre y tras constatar que, a raíz de las mismas, "hay una vacante en la Presidencia en Costa de Marfil". "El pueblo de Costa de Marfil, en su mayoría, ha seguido el llamamiento a la desobediencia civil", sostuvo, antes de destacar que ha habido un "seguimiento relativo" al boicot opositor.
En este sentido, alertó de que "el mantenimiento de Ouattara como jefe de Estado supone un riesgo de guerra civil" e hizo un llamamiento a la "reconciliación nacional".
Asimismo, hizo hincapié en que "más del 90 por ciento" de la población "rechaza la candidatura ilegal y anticonstitucional" de Ouattara y destacó que ambos candidatos "mantienen el llamamiento a la desobediencia civil" y ha hecho hincapié en que la población "siga movilizada hasta la victoria final".
"COMPLOT CONTRA EL ESTADO"
En respuesta, el Gobierno marfileño ha criticado con dureza el anuncio de Affi N'Guessan sobre la creación de un Consejo Nacional de Transición y ha acusado a la oposición de "atentado y complot contra la autoridad del Estado y la integridad del territorio nacional".
El ministro de Justicia del país africano, Sansan Kambile, ha manifestado que el anuncio busca "sustituir a las instituciones republicanas legalmente establecidas" y ha manifestado que se suma a "las violencias cometidas tras el boicot activo" convocado por la oposición.
"Condenando con la mayor firmeza este acto de sedición, el Gobierno ha informado al fiscal (...) para que los autores y cómplices de estas infracciones sean llevados ante los tribunales", ha señalado en un comunicado publicado por la Presidencia marfileña a través de su cuenta en la red social Twitter.
Así, ha defendido que las elecciones se celebraron según las leyes vigentes en el país y ha apuntado que no hubo irregularidades graves "pese al llamamiento al boicot activo lanzado por los partidos políticos opositores, que provocó incidentes en algunos departamentos".
Por último, Kambule ha felicitado a los votantes y a la población en general por "su sentido elevado del civismo y el patriotismo" y ha resaltado que "el Gobierno se inclina ante la memoria de las víctimas que desgraciadamente han perdido la vida durante estos actos irresponsables".
ATACADAS LAS RESIDENCIAS DE VARIOS OPOSITORES
Por otra parte, Konan Bédié ha denunciado que su residencia "ha sido atacada por disparos de armamento pesado" durante la noche. En un mensaje publicado en su Twitter, ha precisado que "simultáneamente" también han sido atacadas las residencias de otros dirigentes opositores, incluida la de Affi N'Guessan.
El secretario ejecutivo del Partido Democrático de Costa de Marfil (PDCI, que lidera Konan Bédié), Maurice Kakou Guikahué, también ha confirmado a la emisora Radio France Internationale detonaciones a última hora de la noche del lunes cerca de las residencias de líderes opositores.
De acuerdo con las fuentes opositoras consultadas por la emisora francesa, se trataría de granadas o de ráfagas de disparos. Los opositores han vinculado estos hechos con el anuncio del Consejo Nacional de Transición. "La coincidencia es demasiado flagrante", ha subrayado Kakou Guikahué.
La misión de observación electoral de la Unión Africana (UA) ha señalado durante la jornada que las elecciones fueron "globalmente satisfactorias" y ha destacado que "la votación se llevó a cabo en una atmósfera calmada y serena en un 98,5 por ciento de los casos".
Sin embargo, la misión de la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) se ha mostrado más crítica y ha apuntado que los incidentes registrados durante la elección suponen "un obstáculo a la democracia", motivo por el que ha hecho un llamamiento al diálogo ante el temor en torno a "la continuidad del Estado" en Costa de Marfil.
"La misión pide a todas las instituciones implicadas en el proceso electoral que tomen nota de los desafíos asociados a la votación y las invita a adoptar medidas apropiadas para responder a todas las preocupaciones para garantizar una continuidad del Estado en serenidad y diálogo", ha dicho el jefe de la delegación, Hadjibou Soumaré.
Muchos marfileños temen que otra polémica electoral pueda conducir a una nueva oleada de violencia como la que sacudió el país entre 2010 y 2011, cuando Gbagbo se negó a reconocer la victoria de Ouattara, que remachó una década turbulenta en la que Costa de Marfil tiró por tierra años de avance próspero y estable.